El Hobbit: La Batalla de los Cinco Ejércitos

Estimados Lectores:

¡SOY LIBRE! ¡Finalmente puedo tirar los apuntes a la basura y dedicarme a lo que más gusta: hablar de películas pertenecientes al magno género del cine basura! Ha sido un tiempo de vacas flacas en el blog, pero este enero les compensaré con muchas películas realmente basurientas. Y que mejor que empezar nuestra gran maratón interminable que con el final de la trilogía apellidada interminable, el Hobbit. Tras casi 9 horas de película, montones de agregados innecesarios, elfos voladores, gusanos gigantes, Kate enamorada, ciervos elegantes, canciones y el cameo más innecesario de Sauron de la historia, ¿que nos deja el Hobbit como saga? ¿Es mala, es buena, o acaso no la estábamos entendiendo desde el principio? 

There will be no dawn... for men... I mind, dwarfs. Dwarfs.

Título Original: The Hobbit: The Battle of the Five Armies

Año: 2014

Director: Peter Jackson

La parte final de la saga nos trae, básicamente, las sobras de las otras dos, lo que no cupo en "La Desolación de Smaug", esto es, el desenlace (de cinco minutos) del gran ataque de Smaug al pueblo (la mejor parte de la película si me preguntan) y la consecutiva batalla de los cinco ejércitos. Este conflicto se inicia cuando la voz de que La Montaña Solitaria ha sido desocupada comienza a correr por la Tierra Media, lo cual genera un movimiento de elfos, enanos y hombres en busca de las riquezas custodiadas por el dragón, y que Thorin, enloquecido por la fiebre del oro, se niega a compartir. Sin embargo, no son los únicos que han puestos sus ojos en la fortaleza enana: dos ejércitos de orcos se aproximan desde diferentes frentes y no tienen intención de dejar a nadie con vida.

Paralelamente, Gandalf y su compañía de elfos y magos innecesariamente poderosos se baten a duelo con el Nigromante, un poderoso hechicero (que todos sabemos que es Sauron desde la primera vez que apareció, ¿para que tanto secretismo?); mientras Legolas y Elfa-Kate intentan detener al segundo ejército que se aproxima para barrer con todos los enanos. 

Es una buena cosa que me hubiera interorizado varias semanas antes que no estaba frente al magno cierre de la saga estilo "El Retorno del Rey", de una imagen que quedaría generaciones por venir, de la película que llamaríamos "la última Peter Jackson" y luego mostraríamos a nuestros hijos y nietos fumando hierba de pipa junto a nuestra puerta circular en la comarca... Porque no lo es. Y nunca intentó serlo. Es muy probable que de haberme sentado en el cine con Anduril en mi empuñadura como lo tenía planeado originalmente, habría salido en llamas chillando como Denethor desde el séptimo círculo de Minas Tirith.

Este no es un evento cinematográfico. Es un circo-comedia de acción. Y como tal... ¡Funciona!

Y es que eso se ve reflejado de forma total en la gran batalla que resulta ser un enorme despliegue de efectos especiales God of War, con cuatro ejércitos (y un tramposo quinto... ya hablaré de eso), chocando entre ellos en un caos total, en lo que en el libro se traducía en apenas unas 10 páginas (porque Bilbo perdía el conocimiento). Y como tal, ¡es una batalla muy entretenida! Por supuesto, se queda muy atrás del asedio del Abismo de Helm o la batalla de los campos de Pelennor, pero entre el desfile de animales que despliegan los enanos y los elfos, y los trolls suicidadas de los orcos, honestamente, no puedo quejarme.

Bitch, Im Fabolous

De todos modos, al igual que el clímax de La Desolación de Smaug, la batalla se alarga muchísimo. MUCHÍSIMO. Particularmente la sección del hielo, dónde solo seguimos a cuatro de los enanos, a Legolas el elfo mágico volador (no pregunten) y a Bilbo quien no hace mucho de todos modos. ¡Mientras la gran batalla ocurre abajo! ¿Porque? Y me molesta particularmente porque ciertos pasajes de la batalla quedan reducidos a segundos siendo que pudimos centrarnos bastante más en ellos en lugar de "Legolas salva el día por enésima vez", particularmente la llegada de Beorn. Digo, ¡pudimos alargar todo lo demás como chicle, porque no darle más de 10 segundos! 

Fuera de la batalla, hay elementos que me gustaron bastante y otros que deteste profundamente. En los primeros, por supuesto, los grandes ganadores de esta película son Bilbo y Thorin. ¡Que bien actuados los personajes! Martin Freeman y Richard Armitage dan sus mejores interpretaciones a la fecha, creando algunas escenas bastante intensas, a pesar de ser muy breves. Adoro especialmente un momento Bilbo le dice a Thorin que su parte del tesoro será una bellota. Es un momento simple, sin efectos, solo los dos hablando en las cámaras de la Montaña Solitaria con la música de Howard Shore sonando sutilmente. Esos momentos me recordaron a la vieja trilogía por un momento. 

Pero creo que, sin duda, mi momento favorito es el ataque de Smaug al pueblo. Los efectos son geniales, generando una verdadera sensación de tensión. Este, además de los Acertijos en la Oscuridad de "Un Viaje Inesperado", son los únicos momentos que quedaron exactamente como los había imaginado en el libro. Y es una lástima, ¡porque es muy corto, tan solo los primeros 5-10 minutos de película! Quizás debimos cerrar La Desolación de Smaug con esta escena: aquí se pierde fácilmente. 

Es interesante como toda esta artilerría no es usado en ningun momento para tomarse la montaña solitaria...

Lo que sí me molestó profundamente es el guión. No, no a la historia que ya existía, ¡me refiero a los diálogos! ¡Son lejos los peores de toda la saga! Los únicos decentes son los que tiraron para el trailer, ¡y algunos ni siquiera tienen sentido en el contexto donde son usados! "Estos cuervos han sido criados por un solo propósito... para el trailer". ¿Qué pasó? ¿Le entregaron súbitamente el libreto a un pendejo de cinco años? La peor manifestación de esto es el "personaje humorístico" de la semana, el lengua de serpiente de turno cuyo nombre no recuerdo, ¡ni siquiera sé cual fue todo su propósito en la película! Cierto... rellenar las 2 horas y media. Alguien tenía que hacerlo.

Y aunque no me molestó al mismo nivel que eso, no puedo dejar de manifestar lo decepcionante que fue el desenlace de todo el asunto con Sauron. Sí, dio para una pelea entretenida, ¡pero se terminó en la primera media hora de película! ¡Y nunca volvió a ser mencionado! ¿Para eso tuvimos que rellenar las otras películas? ¿Para ver a Cate Blanchett explotar de forma aún más ridícula que en La Comunidad del Anillo? 

Para ir cerrando, no puedo no mencionar la desastrosa trama de Evangeline Lilly. Miren, nunca fui de los mayores detractores de su presencia, pero honestamente pensé que tenían preparado algo más interesante que este dramón quinceañero entre un enano y una elfa que se han visto dos veces en la vida y ya se juran amor eterno. Por un segundo creí que tendrían algo más interesante en mente, particularmente en el desenlace (que por la parte de Kili ya era conocida para quienes leyeron el libro). En fin...

En suma, ¿es una mala película? No. ¿Es buena? Es entretenida. ¿Está a la altura del Retorno del Rey? Ni por casualidad, pero nunca hubo que entenderla así. Es más en la línea del Peter Jackason pre "El Señor de los Anillos", con un humor más burdo y slaptick (no por nada, es el mismo director que en Braindead incluyó el magno "I KICK ASS FOR THE LORD!"). Mirada como un mero producto de entretenimiento, La Batalla de los Cinco Ejércitos es un producto impecable, salvo por que se alarga más de la cuenta con romances y humor barato. Vayan a verla al cine, lo vale por ver finalmente al maldito ciervo de Thranduil en acción. Un 7/10. 

Bueno, y con esto terminamos la trilogía del Hobbit. Si bien sigo pensando que le hizo un enorme daño a la saga cortarlo en tres partes en lugar de dos (o incluso 1), me alegro que haya existido y haber visto a Smaug en pantalla, entre otros grandes momentos. A pesar del mal sabor de algunos añadidos y los efectos especiales excesivamente computarizados, me quedo con el recuerdo de las grandes actuaciones de Martin Freeman, Ian McKellen y Richard Armitage, con la magna escena de Gollum, el enfrentamiento de Smaug y Bilbo en el tesoro, y el ataque al pueblo. Sí por eso tuve que pasar 9 horas de película, pues lo valió.

Atentamente,

Farfaramir, Escudo de Cerveza

Posdata: ¿Para qué demonios los orcos trajeron a los gusanos gigantes a la batalla? O sea, entiendo, cavar túneles, ¡pero eran un gran arma! 

Posdata 2: Bardo usando a su hijo como arco es una de las cosas más ridículas que ha habido en toda la saga. Se perdona, porque el ataque del dragón estaba la raja. De todos modos, ya que habiamos incluido canciones y trolls que hablan, ¿donde estaban los cuervos mágicos?