martes, 18 de febrero de 2014

Ernest & Celestine

Estimados Lectores:

Siguiendo nuestra lista de películas nominadas en el área de mejor película animada a los Oscars 2014, el Bar Cinéfilo de Farfaramir se enorgullece en presentar a ustedes: KAWAII, LA PELÍCULA! No, no con adolescentes japonesas haciendo fanservices cada cinco minutos con voz de ultra sonido, ¡esas son la clase de películas que revisa Ignis Fatuus, quien por cierto sigue atrapado en Somalía peleando con unos piratas que tienen las únicas copias de "The Winds Blows"! No es como que lo vaya a despedir si no las consigue antes de los Oscar (spoiler: si lo voy a hacer), por lo que en el intertanto, nosotros revisaremos una tierna película infantil francesa sobre... ¿un oso y un ratón? 

Nuevo juego: un trago de vodka cada vez que digan "aaaaaw" en esta película. 10 minutos e intoxicación asegurada. 

Título Original: Ernest Et Célestine
Año: 2012
Director: Stéphane Aubier, Vincent Patar y Benjamin Renner

Esta película retrata de manera fiel una clásica rivalidad de la naturaleza: ratones y osos... ¡MOMENTO, ESA NO ES UNA CLÁSICA RIVALIDAD DE LA NATURALEZA! Ratones y elefantes, claro; osos y guardabosques, también. ¿Qué es esto de que los osos y los ratones se llevan mal? Ambos son peludos y si tu madre los encuentra en la cocina se pondrá a gritar en histeria suprema, ¿qué otra cosa tienen en común? O más bien, ¿en qué se oponen? Unos comen miel y los demás queso, ¡osos contra ovejas y ratones contra vacas! ¡Esas son rivalidades! Ignórenme, en realidad, "Ernest y Celestine" están basados en una serie de cuentos ilustrados para niños, y la película se siente como si estuvieras leyendo uno. En un buen sentido. Y por lo que me da a entender la película, la rivalidad entre osos y ratones tiene un origen bastante ingenioso, pero no nos adelantemos. 

Celestine es una pequeña ratona (entreparéntesis, por casi una hora de película no pude determinar la sexualidad del personaje) que vive en un orfanato donde se les enseña a los pequeños ratones que los osos son perversos y se comen a los ratones. Por su parte, Ernest es un oso donde los ratones son mirados con odio, pues es sabido que estos suelen robar los dientes caídos de los osos para sus clínicas dentistas (no estoy inventando esto). Sin embargo, Ernest es casi tan odiado como los ratones: es flojo, hambriento y no tiene un peso, tratando de ganarse la vida tocando el acordeón. Sin embargo, por las vueltas del destino ambos terminan reuniéndose, formando una gran amistad... pero el resto de la sociedad no lo verá de la misma forma.

Yo cada mañana

Son muy raras las películas de animación del estilo de Ernest y Celestine: por un lado, es una cinta netamente dirigida a un público infantil (no es que lo contrario sea malo, adoro las películas para niños que solo un adulto puede apreciar); sin embargo, no comete el error de tratar a los niños como idiotas. Hoy en día o haces una película profunda tipo Pixar que esta camufladamente dirigida a los adultos; o haces una película estilo Pitufos donde los personajes son descerebrados y que solo un retrasado podría disfrutar. Ernest y Celestine cuenta una historia simple, sin mayor complejidad, que se reduce en "la amistad no conoce fronteras", pero no lo hace de tal forma que el espectador se sienta insultado. Es tan buena la película que hasta te da la impresión que te esta diciendo algo nuevo, sin que esto sea cierto.

Lo mejor de todo es la animación: no es particularmente compleja (aunque no estoy seguro, ¿cómo demonios animas estas película?) pero logra crear la ilusión de que se trata de un libro de cuentos cobrando vida ante tus ojos. Quizás los personajes tienen diseños infantiles, ¡pero es una película para niños, de que no estamos quejando! Y de nuevo, no es condescendencia con la cinta: lo que hace bien, lo hace excelente. Hay una escena magnífica donde Ernest toca el violín y la animación se transforma en una lluvia de colores que van creando poco a poco la cabaña del oso; personalmente, en su simpleza alcanza la grandiosidad de la construcción del castillo de Elsa en Frozen.

"Y la leyenda dice que Michael Bay se pasea por las habitaciones de los niños, listo para tomar una franquicia, devorarla y mandarla a la mierda!".

Ahora, muchos de ustedes deben estar pensando: "yo tengo 24 años, me he pasado el verano jugando Assasins Creed y no quiero saber nada con mi primo chico a quien odio, ¿debería verla igual?". Pues... Es una cinta para niños, se los digo, pero no significa que no la puedan disfrutar. Les prometo que no tiene ningún momento de humor infantil vergüenza ajena; e incluso trae varias reflexiones importantes sobre la sociedad. La relación de Ernest y Celestine es muy natural (de hecho, en su primer encuentro Ernest intenta devorarse a Celestine), y aunque es bien Kawaii, no van a vomitar arcoiris. En cuanto a la trama, aunque la presentación no es particularmente original, no esperen un desenlace obvio como "los ratones y los osos se arreglaron y todos vivieron felices en un hongo gigante". Además, tiene cierto sentido del humor bastante inteligente; mi escena favorita ocurre cuando otro oso le pregunta a Celestine cual es su mayor deseo. La conversación es más o menos así:

     -Mi mayor deseo es estar con Ernest y no dejarlo jamás.
     -¡Qué cosas dices! ¿Cómo vas a estar con un oso? Habrase visto cosa más rara, no funcionaría.
     -Usted está casado con una oso.
     -Exacto...

Sutil, pero genial. De todos modos, no creo que gane, Frozen es un monstruo demasiado gigante como para ser vencida por una película tan inocente como esta (no es que me queje, me encantó Frozen). Es corta, es divertida, es KAWAAAAAAIIIII... ¿Qué más pueden pedir? Ni siquiera tenga una crítica que hacerle, así que un 10/10. 

Atentamente, 
Farfaramir KAWAAAAAIIIIII

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