Estimados Lectores:
En todo el mundo, los fanáticos (y unos cuantos imbéciles con metralletas que mancillan el séptimo arte) hacen fila para ver la última entrega de "The Dark Knight". En todo el mundo, por supuesto, no hace referencia a Chile, quienes recién podremos disfrutar de tan magno evento en una semana más. Y con suerte, porque de ahí hay que hacer la cola, esquivar los fanáticos disfrazados de Bane (Cuando Gotham seas cenizas, tendrás permiso para colarte), ya saben, lo de siempre. En el intertanto, tenemos tiempo para pasearnos por algunas de las manifestaciones de Batman en el cine, aunque no iremos tan atrás para conocer al Platano Bolígrafo y al tiburón explosivo (Lo siento, Adam West). De momento, iremos a 1989, cuando Batman dejo de hacer bailes para transformarse en un personaje obscuro y atormentado, más cercano al comic, y para convertirse finalmente, para muchos, en el mayor logro de DC. ¡Batman según Tim Burton, señores! ¿Comentamos?
Por suerte, el señor Burton todavía no sucumbía al tick de poner a Johnny Deep como héroe de absolutamente todas sus películas.
Título Original: Batman
Año: 1989
Director: Tim Burton
Ciudad Gótica, una suerte de siniestra metrópolis con arquitectura digna de un Infierno de Dante futurista (de verdad, quien le paga a esos arquitectos?... Aunque el diseño de la ciudad es un punto positivo para esta versión), es presa de una ola de crimen a puertas del Bicentenario de su fundación, y de la corrupción de sus propios funcionarios y policías. Sin embargo, una extraña figura vestida de murciélago ha provocado terror entre los delincuentes, quienes no están seguros de creer si es un mito o un hombre de verdad. Es nada menos que... ¡Batman! Dos periodistas están decididos a descubrir la verdad detrás de el misterioso enmascarado, ¿quién se oculta detrás de la máscara? A menos que sean viajeros del tiempo del año 1800 o han estado encerrados en un bunker todo este tiempo, no creo que sea spoiler señalar que es Bruce Wayne (Interpretado por Michael Keaton), el excéntrico multimillonario dueño de Wayne Enterprises, quien tras ver a sus padres morir a la salida de un teatro, ha decidido combatir el crimen inspirando miedo en los delincuentes, del mismo modo que ellos causan terror a los habitantes de Gotham. (¿Introducción innecesaria y que todos ya sabíamos? Check).
Sin embargo, cuando uno de los secuaces del mayor líder de la mafia se enfrenta a Batman en una redada de la policía, cayendo como resultado en un pozo de químicos industriales, un terrible criminal hace su aparición en Ciudad Gótica ¡El Joker! (No, por favor, no me hagan decir el Guasón, lo único que pienso es en un campesino con chupalla gigante bailando cueca con ese nombre), interpretado sublimemente por Jack Nicholson. Ascendiendo al punto de controlar toda la mafia de la ciudad, Batman se verá enfrentado a pocos días de presentarse como súper héroe contra el mayor villano de la historia, un desquiciado que se sirve de gas de la risa para asesinar a sus víctimas. Sin embargo, la situación se complica aún más cuando el Joker pone sus ojos en Vicki Vale (Kim Basinger), la periodista que busca a Batman, y quien al mismo tiempo es el interés romántico de Bruce Wayne. ¿Podrá salvar la ciudad antes del Bicentenario, detener al Joker, salvar a la chica y demostrarle a Gotham el verdadero héroe que es?
Have you ever danced with the devil in the pale moonlight?
Miren, se ha hablado mucho últimamente de que las películas de Tim Burton no están ni cerca de ser tan geniales como el trabajo de Nolan, lo que quizás es cierto, pero esto es porque Nolan ha llegado al nivel de maestría absoluta, lo que no signifique que las de Burton se queden atrás. En efecto, dando un primer gran salto de trasladar a Batman a una atmósfera obscura, donde los villanos no son bailarines sino que psicopatas lunáticos en una ciudad corrupta. En ese sentido, el detective murciélago se sumerge en una especie de psicótica película de serie negra, con policías infiltrados, mafiosos que se traicionan unos a otros, y un Joker que si bien es muy distinto a Heath Ledger, tiene su propio toque de mágico. ¡Es un verdadero payaso, uno sádico y asesino, pero un payaso al final! Jack Nicholson sin duda inmortalizo de manera sublime y jocosa el papel en una manera similar al comic (claro, salvo en su origen conocido, muy similar a "La Broma Asesina"). Quizás el papel de Bruce Wayne le quedó un poco grande a Michael Keaton, pero es un detalle menor. Por supuesto, los demás personajes (salvo Alfred), desde Harvey Dent a Gordon, quedan muy relegados en estas películas en general, pero hay que admitir que en el tiempo, no era un detalle muy importante.
La película es entretenida con una historia bien armada, que quizás no se asemeja demasiado a ninguna historia del comic de Batman, pero al menos envuelve bien el espíritu de la saga. Quizás es un poco caricaturesca, pero... Come on, es Batman, no el ciudadano Kane ni el Paciente Inglés. La música de Danny Elfman, por cierto, es inmortal (y me atrevería a decir que la prefiero a la de Hans Zimmer, aunque sólo por un poco), la atmósfera es excelente, y por sobre todo, es sumamente entretenida, en lo que a acción se refiere (con un par de enemigos un tanto ridículos ninjas, pero queda). El diseño de la Baticueva, del Batimovil y en general de la mansión Wayne son bastantes leales al comics y son quizás los que nos hayan quedado grabados en la memoria como los originales. El traje de Batman no es especialmente innovador ni complejo, pero hey... no tiene tetillas, eso es un gran gran gran paso adelante. Como sea, todavía sigue siendo muy entretenida, muy obscura, y perteneciente a la época en que Tim Burton aun hacia películas únicas. Quizás ahora nos resulte infantil, pero eso no cambia el hecho de que sea un deleite de principio a fin. Yo le doy un 9/10.
Batman Returns
Si, es un poco más para página porno que el traje de gatita de Anne Hatheway
Título Original: Batman Returns
Año: 1992
Director: Tim Burton
La segunda entrega de Batman, repitiéndose buena parte del equipo de la película pasada, es una película esencialmente centrada en los villanos: la película se inicia con el pingüino, un niño deforme que es abandonado por sus padres en las alcantarillas de Gotham. Con el paso de los años, y aliándose con un grupo de fenómenos de circo, el pingüino se ha convertido en una amenaza que recorre las cloacas de Gotham. La figura aparece como una amenaza para el multimillonario Max Shreck, un criminal y inescrupuloso empresario que está decidido a establecer una planta nuclear en Gotham City, a pesar de que Wayne Entreprise ya ha detectado que existe exceso de energía en la ciudad. Cuando tras un ataque del pingüino, Max resulta secuestrado, este accede a convertir al pingüino en un personaje respetable, ayudándolo a encontrar a sus padres, ganarse el aprecio del público que lo ha despreciado e incluso llegarse a convertir en alcalde. Pero para ello, deben pasar primero por encima de Batman...
Como si esto fuera poco, la desaliñada secretaria de Max Shreck, Selina Kyle (Michelle Pfeiffer), sobrevive a un intento de asesinato por parte de su jefe. Aburrida de las constantes llamadas de su madre, de su nula emoción en la vida, "Honey, Im Home... Oh, I forgot, I don't have a Husband" (Sublime), y por supuesto, tras darse un buen charchazo en la cabeza, Selina Kyle se transforma en... ¡Gatúbela! (Si, me gusta más ese nombre que Catwoman). Convencida a desatar el caos y vengarse de una sociedad machista, la sensual villana se pondrá en el camino de Batman, incluso aliándose con el pingüino en su empresa por termina con el hombre murciélago. El problema es que al mismo tiempo, su alterego Selina Kyle comienza a mostrar interés en el excéntrico multimillonario Bruce Wayne. Antes que nada, quiero señalar lo increíble que es esta Gatubela y lo difícil que será para Hathaway superar si quiera el increíble rol de Pfeiffer Desde la escena en que la pobre Selina enloquece en su departamento, hasta la voz sensual "Alo 69", todo es perfecto en este personaje.
Sin embargo, a mi gusto quien se roba la película es Dany DeVito en su magnífico rol como el pingüino. ¡Que gran personaje desarrolló Burton en esta ocasión! Bruto, salvaje, pero por sobretodo, con una voz desesperante y agria, el pingüino es a mi gusto el mejor villano de la primera saga de Batman. Sin embargo, ese es quizás el gran defecto, al mismo tiempo, el gran defecto de Batman Returns: es tan centrada en los villanos que apenas hay espacio para Batman. Claro, Batman es quien derrota a los malos y los pone en su lugar, y es Bruce Wayne quien se deja seducir por Selina, pero su rol es accesorio para el auge de dos enormes figuras más obscuras y retorcidas que el mismo Joker de Nicholson. ¡De hecho, Bruce Wayne no tiene absolutamente ninguna trama en esta película, sino ver la manera en que Selina no descubre que él es Batman! De todos modos, como ya mencioné respecto de la primera, Keaton no desarrolla al mejor Batman a la fecha, por lo que a ratos se vuelve más entretenido ver las escenas del Pingüino graznando en las alcantarillas y comiéndole la nariz a sus asociados, o a Gatubela diciendo Miau, que presenciar otra aburrida escena en la mansión Wayne.
La película es más obscura y con un marcado toque Tim Burton, muchísimo más que en la primera. Desde la música de Danny Elfman estilo "The Nightmare Before Christmas" al diseño retorcido del parque de Gotham City (con un usos de cámaras pasando entre columpios y árboles muy Tim Burton), la película se atreve a ir un poco más allá, aunque no pude quitarme la sensación de que Gotham era menos ciudad de lo que fue en la primera, a ratos parece una aldea nevada. Tiene algunas tomas realmente sublimes (El primer encuentro de los tres villanos en cámara con la tienda explotando a las espaldas de Gatubela), y unas líneas de guión realmente insuperables (La acotación sobre las lechugas y tomates del Pingüino es brillante). No me fascinó demasiado que los secuaces de los villanos fueran tan similares a los del Joker (lo que se verá muy acentuado en las siguientes películas... si es que esas cosas pueden llamarse películas), pero en cierto punto logran tener su propia identidad. Casi tan buena como la primera, yo le doy un 8/10.
Como sea, hemos alabado tanto las películas de Nolan que a veces se nos olvida que este es un enfoque de Batman muy distinto, lo cual sucede muy a menudo en los Comics. Nadie podría comparar Año 0 con la Broma Asesina o con El Regreso de Bruce Wayne, porque son estilos y épocas distintas. Lo mismo sucede con las películas. Claro que Nolan superó a Burton, pero eso no significa que debamos despreciar el trabajo del segundo, que por cierto se ha convertido en los últimos años en un director exageradamente sobrevalorado, pero que nos ha dejado clásicos, como Batman y Batman Returns, cuya importancia nos resulta imposible negar.
Atentamente
Hipster Farfaramir
Por favor corrige en el escrito de "Batman Returns", porque la actriz que interpreta a Gatubela es Michelle Pfeiffer.
ResponderBorrarDe resto, totalmente de acuerdo, pienso que esta saga de Burton y la de Nolhan no las supera nadie.
D:... Cierto! Muchas gracias, corregido!
ResponderBorrarNunca olvidare la escena en que gatubela se va a comer el canario de Pinguino. Tampoco cuando pinguino escapa en un pato gigante. Una pelicula muy obscura pero genial.
ResponderBorrarKVS
Wajaja, sublimes escenas por cierto!
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ResponderBorrarFrase útil para romper el hielo. En cualquier situación.
Cuando se estrenó Batman en ¡1989! (puta que estoy viejo) fue todo un acontecimiento. No habían películas de superhéroes en el cine desde la espantosa Superman 4, además que de Batman aún estaba vivo el recuerdo de la serie de los '60, con Adam West que todavía lo daban por Teleonce (o RTU en esa época?), hoy Chilevisión. Es como cuando ahora se siguen viendo en el 13 los capítulos noventeros de Los Simpsons.
ResponderBorrarHabía una cierta desconfianza hacia Batman como película por el recuerdo de la antigua serie, que era entretenida pero ridícula. El mérito de Burton es mezclar una trama oscura, muy de película ochentera, con una ambientación sacada de comic que hacía recordar al Batman de los '60, que insisto, todavía tenía vigencia porque se transmitía por TV. En otras palabras, Tim Burton dio en el gusto a los amantes de las películas de acción, a los amantes de los cómics de Batman que se editaban entonces y a los nostálgicos (y no tanto) de la serie televisiva sesentera.