Soy Leyenda

Estimados Lectores:

Una vez soñé en un futuro post apocalíptico de Hollywood, donde todos los directores habían sido despedidos y el único que seguía haciendo películas era M. Night Shyamalan, y solo adaptaciones de dibujos animados con giros inesperados, como los animales-objetos de los Picapiedras revelándose contra sus dueños en una explosión social faunística; Elisa Tomberry descubriendo que era esquizofrénica y jamás pudo hablar con el simio; Pinky revelándose como la personalidad alternativa de Cerebro es decir, un caos. Solo un hombre podía encontrar la cura: Will Smith. Porque Will Smith universalmente nos ha salvado en cada película que aparece, desde El Día a la Independencia, la Trilogía hombres de negro, Hancock, El Principe del Rap (¡al salvar a Filadelfia de no tener estilo!...). Por suerte, era una pesadilla, y aunque el señor Shyamalan siga haciendo películas, Will Smith sigue presentándose como uno de los mayores héroes del planeta, y quizás obtendremos su concreción máxima en Soy Leyenda, la película Post Apocalíptica de la semana. ¿Comentamos?

Gritarle en la oreja a Will Smith... Nada bueno puede salir de gritarle en la oreja a Will Smith.

Título Original: I Am Legend

Año: 2007

Director: Francis Lawrence

El escenario más o menos es el siguiente: con la esperanza de curar el cáncer, científicos desarrollan una súper cura milagrosa que podría revolucionar la historia de la humanidad. Por supuesto, como siempre Greenpeace insiste en no probar en monos (cuando aprenderán...), la mágica cura resulta tener un horroroso efecto secundario: el 95% de la población se ve infectada por un terrible virus que transforma a los portadores en una suerte de zombies cuya piel no resiste a la luz. ¿Resultado? Años más tarde, el único sobreviviente en que queda en una deshabitada Nueva York es Robert Neville... (¿Longbotton?... ¿Hasta entonces llevaste a Harry en tu corazón?... ¿After all this time?... Always). Junto con su perra Samantha (perra en el sentido de Can, por mucho que el nombre Samantha apunte a otra cosa), recorre la ciudad de día sin habitantes, buscando provisiones, escuchando Bob Marley, cazando animales sueltos, interactuando con miniquís, mientras busca en su casa refugio la cura para el virus que diezmó la población del planeta. Como vamos averiguando a medida que avanza la película, Robert estuvo siempre muy ligado con todos los eventos relativos al virus, y por ello parece especialmente obsesionado en buscar la cura, a pesar de que todo apunta que es el último sobreviviente de la raza humana.

Cuando uno de sus experimentos apunta a una posible cura, pronto se ve involucrado en una lucha de poder con los habitantes nocturnos de la ciudad: los humanos infectados, ya degenerados a su condición más primitiva, transformados en una suerte de zombies con fuerzas superhúmanas (o "cosas horrorosas"... ¿Es correcto llamarlos zombies? No son muertos vivientes en sentido estricto, caben más bien dentro del grupo de infectados por un virus similar a la rabia)..., pronto se enemistan con Robert, a quien hasta entonces habían ignorado por completo. La constante lucha, los maniquis (¡malditos!), y un zombie especialmente furioso podrían comprometer la investigación de Robert, mientras los días pasan sin que nadie responda su llamado, podrían llevar a Robert al borde de la desesperación... Todo esto es alternado con constantes flashback de Robert, sobre el día en que la locura se desató, y a pesar de todo ello, Robert seguirá luchando, y a medida que la trama de la película se desarrolla, comprendemos el porque de la leyenda de Robert, la que no solo implica ser el último sobreviviente de la raza humana, sino que mucho más...

En el fin del mundo yo nací y crecí, con goma de mascar y una metralleta feliz...

Esta película es corta, rápida, inteligente y realmente satisfactoria, pero por sobre todo, muy entretenida. Sin caer en largos ratos de aburrimiento ni en un excesivo frenesí de acción, tenemos 90 minutos para descubrir el estilo de vida de Will Smith en el fin del mundo, su relación con su perro, las luchas contra las horribles criaturas, y muchas cosas más que entran en el área del spoiler. Esto, amigos, es saber distribuir bien el tiempo. Los momentos de acción son increíbles, los momentos de drama muy bien logrados, quizás por la sublime actuación de Will Smith... Que tipo este para poder representar un papel espectacular en una película que a primera vista, parecería apuntar a ser de una índole más comercial. Digo, ¿hay algo que Will Smith no pueda hacer? Realmente me creí que ese podría ser un escenario de fin del mundo... La forma en que la historia está presentada es interesante, vamos descubriendo poco a poco el porque de la extinción de la humanidad y la aparición de las criaturas nocturnas, sea a través de videos, flashback, o ingeniosos papeles de diarios ubicados por las escenas a los que hay que estar muy atentos. Esta película sencillamente no deja nada al azar.

Los efectos especiales son geniales, especialmente en el diseño de los zombies ( Son realmente terroríficos, sus movimientos son tan brutales que llegan a espantar a cualquiera. La primera aparición de las criaturas es especialmente de pesadilla, así que recomiendo para aumentar la experiencia ver con las luces apagadas, a las tres de la madrugada, cuando el hogar está en silencio y no sabes que cosas se esconden debajo de la alfombra (además de chicle y mis guantes, por cierto). Lo que no está tan bien logrado, y que realmente detesté, es la creación de animales por computadora. Realmente destruye la experiencia, una ciudad perfectamente diseñada, al punto de realmente creer que vaciaron la ciudad completa para hacerlo (eso se hizo en 28 días después, no estoy seguro si habrán recurrido a lo mismo aquí), pero animales que parecen sacados de videojuegos... ¿Porque no seguir el ejemplo de 12 monos? ¿Es necesario ver un millón de ciervos corriendo por las calles desiertas de Nueva York? No realmente, a menos que pueda lograrse de forma espectacular, y amigos, no es el caso. Quizás sea el único bache de la película, pero es un detalle que no solo ocurre en este film, sino en muchos... 

El easter egg de la semana, al menos podemos estar tranquilo que no será el fin del mundo hasta que se anuncie Batman v/S Superman...

Hablando de las calles desiertas, que gran trabajo hicieron recreando el escenario post apocalítpico de Nueva York. Desde las aceras cubiertas de pasto, los puentes caídos, los animales por las cal... no, eso no, pero en general, realmente podríamos creer que este es el fin del mundo como lo conocemos, y que la leyenda de Will Smith es el último superviviente (y su perra... Que gran personaje, por cierto). Tenemos la oportunidad de recorrer la ciudad, sus supermercados y tiendas abandonadas, los puertos, en general, es una experiencia bastante completa. Hacia el final, la acción se concentra en un solo punto, (en una secuencia realmente agobiante, es para estar pegado a la pantalla del mini computador en el que bajé la película LSD), pero por regla general, la película nos permite transitar por múltiples escenarios sin perder el ritmo. La fotografía, en este sentido, es otro logro de esta película, incluso en los flashback tenemos un par de tomas realmente impresionantes, así que sin son amigos de películas con buenos efectos y buena imagen, por favor, vean esto en una calidad decente. No sea un picante y arriéndela, cómprela, o sea un noble pirata y dése su tiempo para cargar.

Como sea, en estas vacaciones de invierno, infinitamente recomendada. Ya sea porque son fans de Will Smith, porque les gusta la acción o los zombies, o incluso los futuros agobiantes y desesperanzadores, esta es su película. Incluso, me atrevo a incluir que tiene ciertas dosis de terror, así que quieren verla con la polola para darles un buen susto, también sirve. Es sumamente entretenida, pero por sobre todo, logra captar muy bien el drama de un hombre solitario, obligado a mantener conversaciones con su perro y maniquis, obligado a ver las mismas películas una y otra vez... Menos mal tiene un Blockbuster al lado, o sino tendría que tragarse una y otra vez "The Happening", y eso, amigos, no se lo deseo a nadie (yo ni siquiera la soporté verla la primera vez). Como sea, un 9.5/10 por animales de plasticina corriendo por las ciudades, y admito que es un poco trampa que siga viendo estas suertes de película de ciencia ficción, y lo peor es que se nos vienen más... muchas más.

Atentamente,

Soy Farfaramir