miércoles, 20 de febrero de 2013

Lincoln (Nominada a los Oscars 2013)

Estimados Lectores:

De seguro muchos de ustedes quedaron metidos con el final de "Abraham Lincoln: Cazador de Vampiros", donde tras derrotar a los vampiros rebeldes del sur en un tren en marcha, Lincoln aun tenía una guerra que pelear. Contra vampiros esclavistas. Por suerte, nuestro amigo Steven Spielberg, consciente de nuestra ansiedad cada vez más creciente y nuestra hambre por ver una conclusión a tan bella historia, decidió hacer una secuela (?) sobre Abraham Lincoln ya no luchando contra vampiros sino que contra demócratas en el parlamento. Sabemos que no consideré el año pasado "Caballo de Guerra" como uno de los grandes aciertos de Spielberg aun cuando también estaba nominada a mejor película y... meeeeh... Lincoln es un poco mejor, pero hasta ahí no más. ¿Quieren saber porque? 

Si, esta es una buena moneda para las monedas de un centavo.
Título Original: Lincoln
Año: 2012
Director: Steven Spielberg

Bueno, advertencia: esta historia sucede después de la historia de los vampiros, así que si no la han visto esa les sugiero que partan al tiro, o sino no van a entender la subtrama con Van Helsing y los Hombres Lobo (?). Salvado ese punto, comencemos a cortar el queque, advertiría "Spoilers", pero les digo una cosa: esta es una de las cintas donde conviene saber que es exactamente lo que vas a ver. Por ejemplo: si lo que están esperando son enormes batallas entre negreros y republicanos donde en un momento dado uno de los oficiales dice "los demócratas están ganado el flanco sur, solo un loco podría comandar una tropa para evitar la derrota", y entonces la imponente figura de Abraham se alza desde la sombra con un hacha en una mano y la escopeta en la otra, gritando: "Pues entonces un loco los comandará"... pues esa película no existe. Pero sería espectacular. De hecho, la filmaré yo en el patio de mi casa. En cambio, lo que nos presenta esta cinta es otra clase de batallas: las peleas TV Congreso. Sí, así es, buena parte de esta película solo veremos congresistas discutiendo por la décimo tercera enmienda. Ya, mucho blabla, ¿de que trata esto exactamente? Abraham Lincoln (Daniel Day-Lewis) ha sido reelecto como presidente de los Estados Unidos, al tiempo que la Guerra Civil entre la Unión y los Estados del Sur se encuentra en su punto más álgido, aunque la victoria parece poco a inclinarse a favor de los Republicanos (quienes por muy extraño que parezca... en esta película son los buenos).

La estrategia más lógica de momento para obtener la abolición de la esclavitud parece ser ganar la guerra y luego aprobar la enmienda... sin embargo, Abraham Lincoln piensa lo contrario. Con un sombrero de copa, una barba espectacular y con una estatura imponente, el presidente está preparado para jugar su carta maestra: conseguir la aprobación de la enmienda y así conseguir una derrota política contra los demócratas. Sin embargo, la idea no es sencilla: la aprobación de esta ley requiere 2/3 de quorum, y los republicanos solo tienen la mitad. Sí no eres abogado, probablemente a esta altura estás diciendo donde está la emoción en esta historia... lo siento amigo, esto es Lincoln. Así comienza un juego de intrigas y políticas, donde el Republicano Radical Thaddeus Stevens (Tommy Lee Jones) juega un rol importante, en un ajedrez donde las influencias y las historias son las que valen. ¿Podrán aprobar la enmienda?... Eso es Lincoln, y al primer momento salta a la vista que está mal con ella: es una cinta muy larga para un tema que no es particularmente emocionante. Los grandes momentos son llevados en el mismo congreso, con intrigas y discusiones que a la hora ya cansan. Y sé que es una cinta histórica así que en cierto sentido debe ser leal a lo que realmente sucedió, pero a la mayoría le sorprenderá ver que Lincoln es un observador externo a estas situaciones, quien maneja los hilos desde afuera donde son los diferentes congresistas quienes finalmente llevan la batalla. El protagonismo no es tan marcado. Admito que las sesiones de discusión al principio me entretuvieron más de lo que creía (faltaba que se comenzaran a lanzar avioncitos de papel para que fuera más chacota), ver a parlamentarios lanzándose insultos ingeniosos puede ser muy jocoso... Pero no para dos horas y media.

¿Osas meterte con el Agente K? 

Entonces, ¿porque a pesar de este gran bache esta cinta se alza como la segunda gran favorita para la noche de este domingo? Alguien gritará en el fondo: "porque es gringa, obvio"... Sí, pero hay algo más: las actuaciones son increíbles. No solo buenas: son sublimes. Por un lado, el nominado al Oscar Daniel Day-Lewis se luce como un presidente de los Estados Unidos muy jocoso, que se pasa la mitad de la película contando anécdotas, incluso en los momentos de mayor tensión (como uno de los bombardeos), lo que causa la risa de sus aliados y la desesperación de sus enemigos. El trabajo de maquillaje y vestuario para recrear a Lincoln es espectacular: la persona que está ahí es Abraham Lincoln personificado. Sin embargo, por quien me voy a sacar el sombrero es por Tommy Lee Jones: Don Tom, encontró el rol perfecto para usted. No sé quien podría poner cara de perro amurrado toda la cinta de esta manera sino Tommy Lee Jones. Cada vez que intervenía en la cinta, me daban ganas de aplaudir de pie, sus alucaciones ante los demócratas no son solo un gran trabajo de guión sino que son conducidas de manera genial por este actor quien, debo admitir, nunca ha sido uno de mis favoritos (Salvo por las Men In Black). Me saco mi sombrero de copa y mi inclino ante usted: ojalá que gane mejor actor de reparto. ¡Y el resto del cast también se luce! Aunque con breves apariciones, Sally Field se luce como la primera dama, quizás aportando algunos de los pocos momentos realmente humanos y dramáticos de las cinta. Podría seguir nombrando, pero captan la idea: tenemos enormes actuaciones para una cinta no demasiado espectacular. El balance es positivo, pero no impresionante. 

¿Porque podría ganar? Si no me equivoco, son 12 nominaciones en juego. ¡DOCE! ¡Le falto añadir al antepasado de Mike Wasasky entre medio para que también fuera nominada a mejor película animada y completar el set! Las nominaciones ya hacen peso, pero sin duda el nombre de Spielberg también. Estamos hablando de un peso pesado. Por otro lado, los que ya dan ganado a Argo deben considerar que en los Oscars hay influencias políticas compitiendo por ver cual de estas dos se lleva el premio mayor (yo espero que Argo, pero es otro asunto). Hasta ahora, las premiaciones pasadas no me han dado la razón, pero los Oscars siempre puede ser hora de sorpresas. Y siendo una película épica e histórica sobre uno de los presidentes más emblemáticos de los Estados Unidos en una premiación de Estados Unidos, donde todos aplaudimos la libertad, blablablabla (si, esta es una cinta bien gringa, más que Argo a mi gusto, si no sales con ganas de comerte una hamburguesa en el McDonald y saborear la libertad en tu paladar, entonces vimos una película distinta)... digamos que ya tiene buena parte de la carrera hecha. Súmale a esto las actuaciones geniales y ahí tienes: Oscar en bandeja. Y sí, dentro de todo, no es una cinta mala, es bastante mejor que algunas de las nominaciones del año pasado que competían por el primer puesto (Cof, cof, HUGO, cof, cof), así que puedo pasarlo. Incluso algunas escenas son no solo buenas, sino que geniales, como la tensa escena de la votación por la enmienda, con lo ridículo que parece, me tuvo mordiéndome los dientes hasta que dan el resultado final. 

¿Les conté la vez que me enfrenté al ejército de Zombies?*

¿Porque podría no ganar? Acá me juego la vida: no va a ganar, a pesar de todo lo dicho anteriormente. Primero... porque no siendo una mala película, tampoco es muy buena. No creo que lo merezca. Y mucho más viniendo de Stephen, ¡Señor, usted es uno de mis directores favoritos de todos los tiempos, si es que no mi favorito, USTED PUEDE HACER MEJOR QUE ESTO! Condense, introduzca dinamismo a la historia, no haga como 800 películas por año, dedíquese a un solo proyecto a la vez, en lugar de andar produciendo cada guión basura que encuentre tirado en la calle, y abóquese a hacer esta película BIEN... si la película es buena, no es gracia a usted o a la ya genérica música de John Williams (usted esfuércese más también), sino por el trabajo de los actores. ¡Ellos merecen el Oscar, no usted ni su película! Y por otro lado, hay que decir que ni las premiaciones pasadas ni la crítica ha sido tan condescendiente con la película, empezando por mi. Incluso Hermes que se ha vuelto un amarillo que le gustan todas las películas del planeta (lo siento, Hermes, pero Prometeo es malísima, digas lo que digas) no le da mucha bola a esta. ¿Que le vamos a hacer? Miren, es el mismo asunto que Caballo de Guerra: ninguna de las dos es una mala película, al contrario, creo que ambas son buenas, e incluso esta es mejor, ¿pero para Oscars? Paso. Vestuario, maquillaje, edición, sonido, etc... lo compro. Le compro aspectos técnicos y actuaciones, pero como película en general creo que me quedaré con los vampiros. 

En suma, si eres fanático de Abraham Lincoln como Bachelet (?), vaya a verla, estoy seguro que la disfrutara. Lo que es el resto del mundo, meh, pueden verla con la advertencia que es una película sobre políticos donde el aspecto "actuación" brilla mientras que la dirección se cae a pedazos. A Caballo de Guerra le di 7.5, así que supongo que a esta le daré 7.9... Que es casi "Muy Bueno", pero no tanto.

Atentamente
Farfaramir y... ABRAHAM LINCOLN CONTRA CHUCK NORRIS!!!!


*Por cierto, Abraham Lincoln vs Zombies existe... pero ya llegaremos a eso. 

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