domingo, 2 de agosto de 2015

Anastasia (Fin Maraton Don Bluth)

Estimados Lectores:

¿Saben? La carrera de Don Bluth es como "La Tierra antes del Tiempo". Un inicio hermoso, lleno de aventuras y felicidad, y de pronto, un terremoto llamado "Disney: La Sirenita" lo destruye todo. Y a ratos, parece que jamás llegaremos al Gran Valle, que Don Bluth jamás sacará algo tan genial como El Secreto de NIMH o An American Tail... Pero justo en la hora más oscura, tras derrotar al tiranosaurio de El Troll en Central Park, el Gran Valle aparece en forma de Anastasia. Y todos lloramos de felicidad. ¡Es hora de destruir la historia de Rusia con esta genialidad!

...y Titan A.E. es "Regreso al Valle Encantado", la que recuerdas como harto mejor de lo que realmente es...


Título Original: Anastasia
Año: 1997
Director: Don Bluth, Gary Goldman

Supongo que necesariamente debo mencionar al paso al elefante en la habitación. Sí: Anastasia es un insulto a la historia de Rusia, sugiriendo que la Revolución de 1916 fue consecuencia no de la incompetencia de Tsar y de las grotescas condiciones en que vivía el proletario, sino de un zombificado Rasputín lanzando un montón de demonios verdes al aire. Ahora, como Anastasia es básicamente una película que imita a Disney punto por punto, estudio experto en no respetar el material original... ¿A alguien realmente le molesta la desviación? 

A mí al menos no, y eso que he leído bastante de historia rusa. Rasputín es uno de mis personajes históricos favoritos, pero... ¿Debería importarme que Don Bluth lo haya convertido un cadáver cantante con la voz del Doc de Volver al Futuro? ¡Para nada! Y la explicación es simple: si extrapolamos el material original y tomamos la película por sus propios méritos, esta última sigue siendo genial. Esto aplica también a mi película favorita de Disney, el Jorobado. ¡Yo he leído el libro "Notre Dame de Paris" más de una vez, sé lo insultante que son para el legado de Victor Hugo los cambios en la historia...! Pero en ambas películas, si los consideramos de forma independiente a su material inspirador, el resultado sigue siendo espectacular. Si pudieron pasar "El Resplandor" de Kubrick sin enojarse porque no se parecía en NADA a lo que escribió Stephen King; o a "Gladiador" por la ensalada que dejaron en la historia romana, esta cinta no debería ser un problema. 

Dicho eso, olvíden todo lo que saben de la revolución de febrero y sumérganse a esta ensalada conmigo: la familia de los Romanov, líderes de Rusia a principio de siglos, viven una cómoda vida en sus palacios rusos, pero su suerte está a punto de llegar a su fin. El vengativo Rasputín (Christopher Lloyd), quien vendió su alma al... erm... mal (?), ha desencadenado una maldición sobre la familia de Tsares, quienes son atacados por el malvado proletariado demoniaco... (Sí... en realidad, puesto por escrito, es bastante ofensivo).

Sutil

Durante la revolución, la hija del tsar Anastasia (interpretada por Kirsten Dunst y Meg Ryan), intenta escapar con su abuela, pero durante la fuga cae al suelo y pierde el conocimiento y su memoria, quedando perdida y olvidado. 10 años más tarde, su abuela sigue buscándola, y los rumores de una recompensa por hallarla con vida ha atraído a numerosos cazarrecompensas. Es uno de ellos, Dimitri (John Cusack), quien da por accidente con la amnésica Anastasia, ahora bajo el nombre de Anya. Decidido a cobrar la recompensa, convence a Anya de viajar a Francia a encontrar a sus últimos parientes... pero Rasputín, quien sigue vivo en 1926 porque... erm... ES CHRISTOPHER LLOYD, NI SIQUIERA DEBERÍAS ESTAR PREGUNTANDO, está decidido a terminar lo que comenzó hace 10 años.

Muchas personas creen que Anastasia es una película de Disney, y la confusión tiene una razón de ser: todos los elementos de las cintas Disney de los años 90 están presentes. La animación es similar, los diseños de los personajes, las canciones, ¡incluso el villano parece una mezcla de Jaffar, Ursula y Scar! ¿Un Rip Off? Bueno, considerando que Don Bluth es un ex animador Disney, me atrevo a decir que no. Simplemente siguió la evolución natural, saltando de los horrores que estaba produciendo para volver a un producto atrevido, con harto cariño puesto en él, y aunque tiene un par de problemas allí y allá, el resultado no puede ser más reconfortante. En el fondo, Bluth pasó la misma crisis que atravesó el ratón Mickey en los ochenta, y emergió victorioso con Anastasia. 

Hablemos del par de problemas, ya que estamos en eso... La historia, aunque parte con harto vuelo, pierde harta fuerza hacia la mitad del segundo acto, con nuestros protagonistas enlazados en un drama amoroso por un largo período sin que nada realmente suceda. Quizás la razón principal se deba a que el personaje de John Cusack no es nada de interesante, es tu protagonista masculino "cool" genérico, que en el fondo "tiene un buen corazón" y todas esas pelotudeces que has escuchado mil veces...

AFUEEEERA UN DÍA VIVIIIIIIIR (?)

Pero fuera de esos detalles, esta película es una joya de la animación. Y con joya de la animación, tomenlo literal: el arte en esta película es espectacular. Es absolutamente distinto a lo que habíamos visto en cualquier película de Bluth (más cercano a Titan A.E. sí es que nada), pero sin perder los escenarios hechos a mano que resultan espectaculares para recrear el escenario ruso u otros pasajes europeos. 

Y la historia es grande y épica, más cercano al estilo de las primeras películas de Bluth. Como dije, quizás pierde un poco de vuelo en algún punto, pero entre la música, los personajes geniales y la animación, no me puedo quejar. Anastasia misma no tiene nada que envidiarle a las princesas Disney consideradas más "independientes" como Bella o Mulan. Y para que hablar de Rasputin, quien quizás no se parezca en nada a su contraparte histórica, pero a quien Christopher Lloyd transforma en sin duda el villano más memorable de toda la carrera de Bluth (el Búho de NIMH no es villano). Hay algo extremadamente jocoso en ver a Rasputín caerse a pedazos cada vez que mueve algún músculo. 

Y ya que hablamos de eso... Donde esta película triunfa es con las canciones. En general, todas son muy buenas, pero hay dos que destacan entre el montón. La primera es, por supuesto, "In The Dark of the Night", el tema de Rasputín, ¡que tiene hasta guitarras eléctricas!


Quizás no pueda compararse con grandes temas como "Listos Ya", "Pobres Almas en Desgracia" o "Fuego del Infierno" de Disney, pero sin duda la canción tiene lo suyo, particularmente en el coro y en la invocación de Rasputín de todos los demonios del infierno, un buen ejemplo de lo visualmente genial que es la película. Sí, quizás Bluth pudo ir por algo más espectacular que unos bichos que cantan, pero algo es algo...

El segundo tema es uno que ignoré totalmente cuando vi esta película siendo niño. Ahora como adulto, creo que es lejos la mejor secuencia musical y de animación de Bluth en su carrera... Solo vean:


El trabajo puesto en la orquesta y animación de esta canción es a otro nivel. Cuando las parejas de baile fantasmales surgen desde los cuadros, sabes que la película ha cruzado a un límite extraordinario, y que si esta fuera una película Disney, probablemente estaría compitiendo entre los mejores canciones de dicho estudio. Simplemente una obra de arte.

Anastasia quizás no quede grabada en la retina de muchas personas, porque el contexto de la historia es extremadamente complicado, aunque el argumento de la película en sí sea bastante simple... pero créanme, vuelvan a darle una oportunidad. No por nada tiene un 86% de aprobación en Rotten Tomatoes, solo superada por NIMH si revisamos las otras películas de Bluth. Personalmente, la ubico como mi tercera favorita, después de La Tierra Antes del Tiempo y Secreto de NIMH. La vería de nuevo una y otra vez. 9.5/10...

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Bueno, con esto cerramos la maratón de Bluth. Hay técnicamente dos películas más en el montón (una de las cuales revise hace muchos años en este sitio), así que dediquésmosle un par de palabras. 

La primera es Bartok El Magnífico, un spin off de Anastasia que se centra en el compañero murciélago de Rasputin. Decidí no revisarla, porque, bueno, salió directamente a DVD y no hay demasiado que sacarle como para cerrar esta maratón con ella. Es una cinta simple, pero divertida, nada del otro mundo. 

Y la segunda la conocen muy bien:


Hace un tiempo escribí una review a Titan A.E. que pueden leer AQUÍ en el contexto de la "Maratón del Fin del Mundo" (¿se acuerdan como el mundo iba a terminar 2l de diciembre del 2012?), y supongo que fui un poco injusto con ella, pero sigo manteniendo que es una película irregular... Pero esa irregularidad nace porque, bueno, es una película atrevida. ¡Es de las pocas películas que he visto donde destruyamos el Planeta Tierra! Pero el concepto "atrevida" justamente dice alusión a que el resultado puede ser bueno o malo, y Titan A.E. es... ok. Nada más. La animación a ratos es espectacular, a ratos desastrosa, los personajes cruzan del cliché a geniales... No es mi favorita de Bluth, pero si le reconozco las pelotas.

Después de Titan A.E., Bluth dejo de hacer películas para dedicarse a los videojuegos, lo cual es una lástima: siento que aún tenía mucho que aportar. Quizás aún no es el momento, cuando Dreamworks comienza a emerger como un peso pesado y Pixar con Disney renacen tras un par de años malos... pero estoy seguro que lo necesitaremos en algún momento. Mientras tanto, podemos quedarnos con el legado de sus increíbles películas, llenas de magia, música y fantasía, increíble animación, historias que sin duda pasarán por muchas generaciones y se volverán inmortales. Es el héroe que necesitamos, pero no el que necesitamos ahora. Por eso lo cazaremos, nos burlaremos de The Pebble and the Penguin, porque puede resistirlo. Porque no es nuestro animador. Es un creador de historias silencioso. Un vigilante observador...

Es Don Bluth. 

Pero no vuelvas a hacer algo como Thumbelina, please.

Atentamente,
Farfaramir, el que aún no ve Ant Man

1 comentario:

  1. Tremenda peli! Y lo mejor es que crece con el tiempo, pues la lejanía con los noventas nos saca el velo de juzgarla como una simple propaganda política y nos hace apreciar más su contenido artístico.

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