lunes, 18 de agosto de 2014

Guardianes de la Galaxia: La Fórmula del Episodio IV más Nostalgia Ochentera

Estimados Lectores:

No he tenido la desgracia de conocer a una sola persona que no haya amado con pasión y locura Guardianes de la Galaxia. Me incluyo, pero siendo honestos, el motivo es bastante complicado de dilucidar. Bajo muchos presupuestos, no debería ser una película particularmente genial, de hecho, hay hartos elementos que me parecieron derechamente rascas, como por ejemplo, la cárcel intergaláctica de máxima seguridad donde solo habían humanos. El misterio de su genialidad se me escapaba totalmente. Así que meditando en el baño (?), llegué a la conclusión de que Guardianes de la Galaxia conjuga bien dos elementos: la fórmula que hizo al episodio IV de Star Wars un exitazo, y una excelente aplicación de Nostalgia Ochentera. ¿Funciona? ¡Por supuesto que sí!

Mapache con metralleta. Enough said


Título Original: Guardians of the Galaxy
Año: 2014
Director: James Gunn (Dato interesante: este es el cretino que dirigió Scooby Doo 2. Significa que los directores pueden mejorar. Te estoy mirando a ti, M. Night Shyamalan). 

Brevemente, ¿de que se trata esta cosa? Pues básicamente de un grupo de caza recompensas, foragidos y criminales que, por las circunstancias del destino, terminan reunidos protegiendo un orbe que contiene una poderosa arma, que en manos equivocadas podría, básicamente, destruir la galaxia. Nuestro colorido grupo es compuesto por el terrícola Star Lord/Peter Quill (Chris Pratt), abducido en su infancia por extraterrestres y ahora un ladrón integaláctico; Rocket (Bradley Cooper) y Groot (Vin Diesel), dos cazarrecompensas inseparables, el primero un mapache mutante producto de experimentos científicos, el segundo un árbol humanoide que solo sabe decir "I AM GROOT" (en este orden); Drax el Destructor (Dave Bautista), un furioso convicto que busca venganza contra quienes asesinaron a su familia, y Gamora (Zoe Saldana), hija adoptiva de Thanos quien ya no desea ser parte de los planes de su perverso padre.

¿Suena simple? Lo es, y ahí reside su gracia. Pero sin detenernos en tanto detalle, permítanme desarrollar mi tesis. Según yo, son dos los elementos que se conjugan.

La Formula del Episodio IV

Es cierto de que existen ciertos paralelos obvios entre Star Wars y Guardianes de la Galaxia, más allá de que, bueno, ocurran en el espacio: ambos consisten en un grupo de héroes inesperados que intentan detener un arma de destrucción de planetas, existiendo una similitud muy obvia entre Han Solo/Chewbacca y Rocket/Groot. ¡Y no me vengan que la escena entre Ronan y Thanos (los dos villanos de la película) no era calcada a la transmisión del Emperador y Darth Vader! Sin embargo, no es esto a lo que pretendo apuntar, sino que a la fórmula que hizo al Episodio IV un clásico: personajes geniales, que interactuando entre sí se potencian; sumado al simple hecho de no tomarse la película en serio. 

WE ARE GROOT

El Episodio IV, más allá de todas las flores que los nerds queramos tirarles, es en esencia, una película bastante estúpida, que se sabe tomar en broma a sí misma, lo cual funciona solo si los personajes son suficientemente carismáticos para comprarnos esta auto parodia. Para mí, gran parte del chiste el Episodio IV era Han Solo discutiendo con Obi Wan sobre la fuerza, de Luke en su inocencia celebrando cada vez que se echaba un Tie Fighter mientras Harrison Ford respondía "Muy bien chico... no presumas", o "tú crees que una chica como ella y yo..." "¡NO!". Es algo que las precuelas de Star Wars no supieron entender, porque no se trata de meter un personaje cómico (si es que Jar Jar se puede llamar cómico) y todo lo demás echarle la cara larga. Hay que lograr un equilibrio complicado entre personajes interesantes y comedia, sin perder el rumbo, y eso es algo que Guardianes de la Galaxia logra a la perfección. De hecho, me atrevo a decir que si las precuelas de Star Wars hubieran sido como Guardianes de la Galaxia, la historia habría sido muy distinta.

Por otro lado, es extraño que una película que tiene que introducir a cinco personajes principales (además de un cast enorme de secundarios, entre los que esta un "Merle" de Walking Dead en versión azul) logre convencernos con cada uno de ellos. De hecho, el más bajo de los cinco es Gamora, ¡y es la hija de Thanos! ¡Aún así es genial! De hecho, me vi sorprendido con el personaje de Drax, quien parecía ser el relleno en los trailers, ¡dio algunas de los mejores momentos de la película! ("Nada pasa sobre mi cabeza, porque tengo buenos reflejos"). Pero no es la existencia de cada personaje individual lo que hace grande la película, sino la interacción de todos. Al igual que en Star Wars, donde los héroes eran caza recompensas, campesinos, robots y ancianos; los héroes acá son realmente improbables, y aún más improbable su reunión. Eso, a la larga lo vuelve héroes más cercanos. 

Y es esa interacción lo que hace funcionar la parodia, la burla a los cliches: si tenemos grandes personajes, podemos permitir a la película ser más liviana, a pesar de que la trama sea simple. Es por eso que los chistes funcionan tan bien. Al igual que la mayoría de ustedes, al menos en tres o cuatro momentos de la película no me podía la risa (particularmente en el círculo previo a la gran batalla y al enfrentamiento final con Ronan). Ambos elementos combinados (grandes personajes/no tomarse a sí misma en serio) simplemente vuelven esta película en algo único. Muchas películas intentan tomar la fórmula del Episodio IV (ejemplo: Titan A.E. Green Lantern) y no resultan, ya sea porque los personajes no apelan, ya sea porque se toma a sí misma muy en serio. (Con tomarme en serio no me refiero a ser mediocre, sino a saber reírse de sí misma cuando corresponde). 

La Nostalgia Ochentera

Merle no está complacido

Ahora, no es este el único elemento que basta para explicar el éxito de Guardianes de la Galaxia. Al leer ustedes, deben estar pensando: "claro, Guardianes de la Galaxia usa un soundtrack ochentero", pero no es esto a lo que me refiero, a pesar de que sí, el soundtrack es excelente y los temas bien elegidos. Me refiero a un punto de vista estético, de la historia misma, de pequeños detalles que hacen recordar esto al cine ochentero. Piensen en las naves, en el maquillaje rasca, en los diseños de los planetas, en la misma idea de mercenarios buenos para la talla y malos como héroes, la música es solo un indicador de que esa es la época donde queremos posicionarnos. Nos recuerda una época donde el cine era menos oscuro, donde se podía bromear, donde podías hacer personajes con pasados conflictivos sin necesidad de hacerlos emos o oscuros. Una época donde era divertido ir al cine.

De hecho, donde primero se nota es en un detalle tan insignificante que es muy posible que ustedes hayan pasado por alto al ver la película: durante nuestro primer encuentro con Star Lord adulto, antes de que entre la música, la película pone créditos debajo. "Vin Diesel como Groot", "Bradley Cooper como Rocket"... ¿Nadie ha notado que eso no sucede en las películas actuales, sino en películas anteriores a los noventa? El guiño es obvio, es una apelación a la nostalgia, y créanme, funciona como ninguna.

Si, me paso todo el día sentado en un trono en medio de un campo de meteoritos mirando al vacío con mi super incómoda armadura de oro. ¡SOY THANOS!

Pero bueno, basta de tanto análisis: la película en sí misma es genial, es entretenida, con buenos efectos especiales cuando los necesita (en otros momentos no tanto), con incluso un par bastante emotivos (otros todo lo contrario), otros bastante ridículos (en un buen sentido)... Sin embargo, no es lo que ustedes quieren que le diga, ¿verdad? Ustedes vinieron a este review queriendo saber si ame a Groot. ¡OBVIO QUE SÍ, QUE ESPERABAN! Pero por supuesto, y gracias a Dios, esta película no se sostiene solo Groot, sino que en los elementos que ya he dicho. No creo que sea la mejor de Marvel como algunos han dicho (me quedó con Capitán America 2, y si agregamos la de otros estudios relacionados, con Days of the Future Past), pero sin duda es con la que más me he reído, y eso es algo que se extraña en el cine de superhéroes, donde hay una tendencia a hacerlo todo oscuro, todo serio. A veces está bien, pero creo que esta película da un giro fresco que se agradece.

Sello de aprobación CINEBASURA, un 10/10.

Atentamente,
I AM FARFARAMIR

1 comentario:

  1. MEJOR PELICULA DE MARVEL!!!! ¿Cual es el secreto? ¡No son super heroes!

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