(Verdad que tengo más esclavos reviewers trabajando para mí... En fin, con ustedes, Ignis Fatuus!)
El mejor tributo de la ciencia ficción realizado por oriente, Neuromante, Blade Runner, Asimov, y otros tantos, metidos en una batidora con ese toque ochentero que caracterizó a todas las películas de esa magnífica era. Estamos hablando de la clásica película de acción de policías violentos con los mejores toques del cyberpunk. Un mundo dividido entre gobiernos controlados completamente por Sociedades Anónimas y fundaciones, como el Hogar de Cristo. Maldad y lucro. Tráiler AQUÍ.
Nota del Editor: ¿Ese sujeto tiene sen...? Olvídenlo.
Título Original: 攻殻機動隊
Año: 1995
Director: Mamoru Oshii
Si creyeron que
Akira era mi película favorita, se equivocaron, Akira no es la mejor película
de animación que he visto. WTF! –Dirán- ¿Acaso todo ese gusto nipón es solo
pantalla, y solo soy el típico admirador del Rey León? ¡Jamás! De hecho siempre
he considerado que la película/serie de “Kimba el León Blanco” le gana a
zarpazos, porque es la original y es japonesa, punto –o material para otra
review-.
Entonces ¿Cuál es
la mejor película de animación? Podría decirles que en gusto no hay nada
escrito, y que no es posible comparar géneros tan diversos, pero esa respuesta
es la clásica de un maraco amarillo que le falta la manzana de Adán. Por
supuesto que puedo comparar, por ejemplo, mis notas son mejores que las de
Samsagaz y el idiota que me robo espacio con la película de Transformers ¿Cuál
era su nombre? No importa (fact). Y por la misma razón, la mejor película que he visto es Ghost in the Shell, el resto de esta
nota justificará lo que acabo de decir, y por supuesto, aprovecharé de resaltar
algunos aspectos de la película que me encantan, ya que esta cinta es la máxima
expresión del cyberpunk.
Adelanto mucho
spoiler e insultos al dueño del Blog, pero parte de lo que lean puede ayudarles
a apreciar mejor esta obra maestra ¿Por qué? ¿Quién mierda me creo? ¿Pasalacua?
¿Farfaramir? ¿El crítico de la nostalgia? ¿Buda? ¿La fontana di Kevin? ¿Porkins?
No. Es que hay dos formas de ver esta película: (a) Como todo el mundo que
tiene mejores cosas que hacer y (b) A lo Ignis Fatuus (significa ñoño en latín
(?)), para esto les recomiendo leer previamente Neuromante (libro de William
Gibson) e investigar un poco sobre las teorías de Arthur Koestler, ambas son la
referencia directa de todo el argumento, ya que Ghost in the Shell es un
tributo a lo anterior, de hecho, El
Espíritu de las Maquinas es el nombre del libro de Koestler.
La película
comienza con una vista desde la red –o matriz como le dicen en Neuromante- lo
genial es el efecto ochentero que usaron -todo verde tridimensional con letras
de computadora cayendo de arriba hacia abajo y…oh es el mismo que en Matrix,
sospechoso, hablaremos de eso luego-. Básicamente, nos vemos inmersos en un
problema diplomático, peor que el de Pinochet en Londres, la embajada de un país
extranjero estaba ofreciendo asilo político a un cyber criminal, por lo que
pidieron ayuda a la sección 9 (departamento de seguridad con facultades
especiales de “Te habría detenido con una orden de arresto escrita, pero no
tenía impresora en mi casa”). Así, es como la Agente Motoko Kusanagi (Cyborg en un 99,9%, y protagonista de la película) aparece en escena reventándole el cráneo al criminal, para luego escapar por la ventana con su camuflaje lascivo ¿Qué es lo mejor de la escena? Tetas ¿Qué? Si, senos, busto, mujer desnuda. Esto es muy importante, como demostraré a continuación es la mejor forma de
saber si una película es buena o mala.
En el anime existe
algo llamado la Teoría de las Tetas Bien
Dibujadas o el Principio de Veracidad del Pezón, bueno en realidad no
existe, porque lo acabo de inventar, pero confío que en el futuro será una
teoría unánimemente aceptada por la doctrina, tal vez hasta inventen un
aforismo como “El pezón nunca miente”.
La hipótesis es la siguiente: Si un
personaje del sexo femenino aparece completamente desnuda en una escena
importante frente a varias personas, estando sus senos extremadamente bien
dibujados, y nadie hace un chiste sobre el hecho que esta desnuda, significa
que estás viendo una obra maestra –sucede poco, créanme-. Cuando digo
chiste me refiero en sentido amplio, desde un comentario hasta todo tipo de expresión
con un propósito cómico como el clásico sangrado de nariz. Vean los primeros
diez minutos de Elfen Lied, y me entenderán.
Siendo justos,
Motoko no está desnuda, usa un traje de camuflaje que es transparente,
imagínense la capa de invisibilidad de Harry Potter, pero con una cuota mayor de
realismo sumado a un fan service generoso – ¡Hermione!, para que la capa de
invisibilidad funcione en ti, tienes que entrar desnuda. ¡Usa la lógica!, la
ropa no se hace invisible contigo-. En conclusión, desde ahora, pongan atención
a los senos. Serious Business, mis amigos.
Tras este evento –con
cierta conexión a la trama-, la sección 9 le ordena a Motoko que investigue el
caso de un Hacker, llamado “El Marionetista”. Pero oh, resulta que este sujeto
esta hackeando cerebros humanos. Lo genial, es que no solo los obliga a actuar
o un tosco lavado de cerebro convirtiéndolos en zombies. Su método consiste en
insertar recuerdos con el objeto de modificar la personalidad, de modo tal que
el sujeto cumple las misiones del marionetista como si fueran las suyas propias
–es como el maldito mercado según los comunachos-.
El operativo para
atrapar al marionetista es genial –diría que es una de las mejores partes de la
película-, sucedió que un recolector de basura está realizando un favor al
marionetista, a cambio de que intervenga la mente de su ex esposa, con la
finalidad de que esta lo vuelva a amar. El recolector recorre la ciudad
llamando a distintas personas desde teléfonos públicos con una tarjeta que el
super hacker le entrega, de esta forma quien recibe la llamada es hackeado por
el marionetista. Pero, esta operación es
frustrada por Motoko y el resto del equipo. Aprovecharé de hablar un poco de
ellos:
El resto del equipo
me encanta, por un lado tenemos a Batou, un Cyborg ex ranger cochinamente
inspirado en Arnold Schwarzenegger , no es una copia barata, ya que tiene toda esa parada de policía ex
militar ochentero de pocas palabras y disparos fáciles, lo que incluye un
sentido del humor muy irónico. La utilidad de este personaje son dos: 1) Cada
vez que Motoko se vaya en una volada muy existencialista la interrumpirá con un
“me estas aburriendo, vamos a joder” y 2) durante toda la película tratará de
salir de la Friend Zone. Lamentablemente para él, no lo logró, pero no se dejen
llevar por esta descripción caricaturizada, Batou es un gran personaje, al
punto que hicieron un Manga sobre él y muchas figuritas de acción.
El siguiente
personaje es Togusa. Les va a encantar porque es un penca ¿Cómo? Es que es el
único miembro de la sección 9 (junto al jefe) que no tiene implantes robóticos,
y obviamente, esto genera un conflicto en un mundo donde todos ocupan prótesis
tecnológicas –no es tan difícil de imaginar, ¿actualmente han pensado en la
vida social triste que tienen sus amigos sin whatzap?-. Togusa ha decido ser
100% humano, incluso, en ciertas ocasiones lo interprete como un acto de
rebelión contra el sistema. De hecho, tercamente insiste en usar, de arma de
servicio, una Mateva autorevolver de 6 balas contra las críticas de toda la
sección 9, a las que siempre responde "Six Bullet is enough to get the job done"–una de las mejores frases de la película-. Es inexperto, pero es
capaz de solucionar los problemas de un modo creativo y cuenta con una gran
intuición. Durante toda la película es posible notar como trata de demostrar
que puede estar al nivel del resto, aunque generalmente lo aparten destinándolo
a un trabajo fácil.
En medio de la
operación encuentran al que aparenta ser el Marionetista. La persecución es
genial, en especial, porque como es clásico en este tipo de películas, es el
momento perfecto para mostrarnos la ciudad y deslumbrarnos con su gastada
arquitectura. Una de las razones de porque me encanta el cyberpunk es por el
diseño de las ciudades, esta no es la excepción.
Es complicado recrear
una ciudad, debido a que estas se caracterizan por su crecimiento espontaneo,
acelerado y carente de planificación. Toda ciudad es una respuesta al “problema
habitacional”, y reproducir este problema/respuesta en un dibujo es sumamente
complicado. Ghost in the Shell lo cumple, fíjense en el distrito comercial, las
zonas residenciales aberrantemente separadas por clases sociales, o esa
carretera que recorre toda la ciudad como la Avenida Vespucio de Santiago –a
propósito, hoy, muchos autores se han dado cuenta que Santiago es una capital
perfecta para escribir cyberpunk-. Además, esa agua que ha inundado los
distritos pobres, es sublime.
La persecución por
los distritos comerciales y las partes abandonadas me encantan, es una cosa de
colores y música. ¡Por las británicas barbas de mis antepasados! La tensión de la escena contrasta con el
ambiente tranquilo que genera la música de fondo –pueden revisar la banda
sonora aquí http://www.youtube.com/watch?v=uxuiFHWNcG0
-. Es muy memorable. Fíjense en la fluidez de los movimientos y el detalle de
cada maldito cuadro. ¡Oxido señores! Se preocuparon de hacer el oxido de cada
barra de metal. Finalmente el sospechoso se ve acorralado por Makoto, la que lo
hace pedazos a golpes y llaves. Insisto, la secuencia es muy buena.
La escena termina
con un interrogatorio de los involucrados, el que revela que ambos en realidad
fueron objeto de la manipulación del marionetista –me encanta el nombre-. En el
caso del sospechoso principal, al parecer era un traficante al que le
implantaron ideología terrorista, haciéndole creer que era la mente detrás de
la operación.
Con el tipo de la
basura es lo mejor, resulto que en realidad el había sido hackeado. El nunca
tuvo esposa ni hija, la forma en que lo exponen es genial –no quiero
arruinárselas-, pero lo mejor es la idea que está detrás y una cierta crítica a
la sociedad actual, en especifico, a la alienación que ejerce esta sobre sus
integrantes. Hoy, el ciudadano tipo de las grandes ciudades es el soltero,
completamente desarraigado de todo tipo de conexión e identidad cultura, sin relaciones
emotivas e incapaz de crear nuevos lazos, empleado con ingresos suficientes
para vivir día a día, pero insuficientes para ahorrar, por lo que es
completamente incapaz de sostener económica-emocionalmente una familia o armar cualquier clase de circulo social. En
otras palabras, es un pizarrón completamente en blanco. Bajo el pretexto de la
independencia y la igualdad, la ciudad ha creado un stock infinito de
personas-jarrones vacios, completamente alienadas/desconectadas con todo. Lo
que el marionetista nos demuestra, es que esos cuerpos sin espíritus son la
materia prima perfecta para crear personalidades fácilmente manipulables para
cumplir distintos objetivos. Lo más triste, es que la vida que le hizo creer
que era real, era mucho mejor que la suya.
Con esto, termino
la primera parte de la película. Por
longitud, continuare con el resto de la película apenas pueda o me tolere la
paciencia del dueño del blog. Espero, que con esta parte haya sido capaz de
incentivarlos a ver esta grandiosa obra de la animación japonesa –un miembro de
mi familia acaba de leer parte de esta nota sin mi permiso, y esta sinceramente
decepcionado de mí e insistiendo que le da vergüenza ser familiar de un Otaku-.
Shit happens, le dije. Hagan que este sacrificio valga la pena, y vean esta
película.
Soy un Héroe.
— "¿Se te acabaron las balas?"
ResponderBorrarEsta película es OBLIGATORIA.