Betibú

Estimado Farfaramir:

Mi nombre es Pablito de los Palos y soy un lector asiduo de su blog, desde aquel fatídico día en que habló de "Cowboys vs Aliens". Sobreviví junto a usted a la maratón de Viernes 13 y Pesadilla en Elm Street, me rasqué la cabeza en su ebria review de "La Era del Hielo 4" y compartí su furia ante la abominación que fue Rec 3. Dicho esto, no pude evitar notar que está pretendiendo escribir una review de Betibú, película argentina proyectada con suerte en 2 salas de cine en todo el país. Deténgase. Vuelva al cine basura. ¡USTED NO ESCRIBE CINE DE VERDAD! ¡NO NOS META MÁS CINE INDEPENDIENTE POR EL CULO!

Respuesta: Oh, señor Pablito de los Palos. Pretendo demostrar en esta review que esto... es cine basura. Pero del bueno. ¿Comentamos?

 Soy la Chica del Dragón Tatuado... solo que sin tatuaje

 Título Original: Betibú

Año: 2014
Director: Miguel Cohan

Adoro el cine policial, especialmente si está plagado de misterios, asesinatos, mentiras, pasados retorcidos y conspiraciones absurdas. Curiosamente, nunca fui un gran fan de la saga "Millenium" (a pesar de lo que ya expliqué en mi review de "La Chica Del Dragón Tatuado") trilogía que pareciera ser la más fuerte en el género de los últimos años; sin embargo, puedo apreciar el buen impacto que ha hecho ésta en hacer resurgir con más fuerza estas historias. Y curiosamente, es en Argentina donde estas historias parecen haber calado con mayor fuerza. Ya tuvimos hace unos años "El Secreto de sus Ojos", hoy es Betibú, una historia que aunque trata sobre periodistas, es propiamente una cinta del género negro.

Cuando un misterioso asesinato tiene lugar en un lindo condominio, el periódico "El Tribuno" decide traer a sus filas a Betibú, una famosa escritora de novelas de misterios quien se encuentra con bloqueo creativo y no quiere escribir más. Y es que el asesinato da para preguntas: la víctima es Pedro Charrazeta, quien años atrás fue sospechoso de asesinar a su propia esposa. Acompañada por otros dos periodistas (un joven y un veterano, este último llamado Brena), seguirán la pista a una misteriosa foto que desapareció de la escena del crimen... Lo que descubrirán podría revelar algo aún más grande que un simple asesinato.

CSI: Buenos Aires

El ritmo de esta película es el de una pequeña bola de nieve que comienza a rodar colina abajo para hacia el final convertirse en una verdadera avalancha de tensión (de hecho, los últimos diez minutos son para andarse comiendo las uñas sin parar). ¡Es así de buena! Una historia tan simple se transforma en algo enorme, sin necesidad de escenas de acción ni otras cosas, simplemente un misterio que crece y crece hasta revelar sus terribles implicancias. Y es que los Argentinos son buenos en eso: contar buenas historias, hacerlas enormes, sin dejar que por eso se sientan historias de Latinoamerica.

Eso es lo que me pasa en general con el cine latino: es poco ambicioso, sienten desde el principio que la película te está pidiendo perdón por no tener una historia más grandilocuente, "Porque disculpen, no somos Hollywood". Betibú es un gran "sí se puede, la historia puede ser enorme". Eso nos dijo "El Secreto de sus Ojos", eso nos dice Betibú. Y esto se nota en la fotografía, en las actuaciones, en los diálogos, ¡oh, y en los escenarios! Aunque las localizaciones no eran particularmente complejas, ¡todas están llenas de pequeños detalles! Me encontré a mi mismo a rato poniendo más atención a los papelitos y folletos tirados en el diario "El Tribuno". Los escenarios no se sienten fabricados, ¡se sienten reales!

Sí, todo este blablabla suena como charla snob, pero la película tiene otra cosa: nunca olvida que tiene que ser entretenida. Y eso es mi otro problema del cine latino: a veces intenta ser tan "profundo", y cree que ser profunda significa ser latera. Por eso nunca hablo de cine hispanoamericano en el blog, ¡porque es una lata! Betibú no lo es. Betibú es entretención para acompañar con palomitas de maíz; pero sin perder el norte de la calidad. 

-Bueno, podemos descartar a Bélgica como el asesino

Ahora, un par de comentarios: me gustaron harto los personajes, pero curiosamente, Betibú nunca me resultó el más atractivo de ellos. No es que sea aburrida, ¡es que los otros pastelones a su alrededor son tan jocosos que prefiero que la pantalla esté con ellos que con la escritora! Lo segundo es que el final mismo es interesante, pero al mismo tiempo un poco apresurado. Es siniestro, rompe con el tono de la película, lo cual me agrada bastante, sin embargo, uno queda con la sensación de "¿y nos van a dejar ahí?". De hecho, en la sala de cine donde estábamos la gente ni siquiera se paró, como esperando que hubieran más escenas. ¡¿Se están burlando de nosotros?! Quizás me hubiera gustado que la película fuera menos ambigua en cuanto a "quienes estaban detrás de todo" (que, sin entrar en spoilers, bien podrían ser extraterrestres y la película seguiría teniendo sentido), pero, ¡hey, ese soy yo!

No pierdan la plata en Transformers. Eso déjenselo a Farfaramir. Usted compre sin compromiso una entrada a Betibú. Quizás no es "El Secreto de sus Ojos", pero es lo más cercano a una digna sucesora que tendremos en mucho tiempo. Yo le doy un 8.5/10

Atentamente,

Farfaramir... era GOL DE PINILLA

Posdatta: Betibú es por Betty Boop. Los argentinos son tan peculiares para su cosas...
Posdatta 2: Es imposible que exista esa clase de periodismo, viendo como los diarios chilenos son solo un copy paste barato.