Estimados Lectores:
No tengo problema en admitir que disfruto de Padre de Familia y sus infinitos clones, pero cuando hablamos de Seth MacFarlane incursionado en el cine, hay que admitir que es una apuesta. Puede salir algo divertido y original como la primera Ted, o algo desastroso y putrefacto como "A Millions Ways to Die in the West". Supongo que es algo similar con los capítulos de Padre de Familia: hay buenos y malos. Así que supondrán que Ted 2 no era precisamente una película que matara por ver, pues auspiciaba caer en ese segundo horroroso grupo. Y por una parte de la película, lo fue, pero por suerte, Ted 2 demuestra que el señor MacFarlane aún tiene algunos chistes buenos que tirar.
Si, ya pueden imaginarse porque no me motivaba particularmente...
Título Original: Ted 2
Año: 2015
Director: Seth MacFarlane
Por si no son familiares con la premisa, la primera "Ted" contaba la historia de un niño llamado John Bennet, quien desea a una estrella fugaz en navidad que su oso de peluche, Ted, cobre vida. ¡Y su deseo se cumple, causando gran sensación en toda la nación! Ambos crecen para convertirse en un par de drogadictos inútiles, y durante esta primera entrega debían lidear con el hecho de que John, interpretado por Mark Walhberg, se involucra en una relación sentimental con Lori (Mila Kunis), y como este afecta su amistad. Al final de la película, logran solucionar sus problemas y Lori y John se casan...
...todo lo cual es deshechado de forma absolutamente gratuita en la segunda parte.
Ted (Seth MacFarlane) ha decidido casarse con Tamy Lin, su novia de la segunda parte, pero su relación tras el matrimonio es un desastre. Decidido a darle un nuevo respiro a la relación, John, QUIEN SE DIVORCIO DE LORI (ya hablaremos de eso) le sugiere tener un hijo. Como Ted es, bueno, un oso de peluche, debe adoptarlo o obtenerlo a partir de un donante de esperma. Es aquí cuando de pronto se desata el infierno: el gobierno de los Estados Unidos decide declarar a Ted como "no persona", perdiendo todos sus derechos, incluyendo su matrimonio. Ahora, Ted y John, con la ayuda de la joven abogada Samantha Leslie Jackson (Amanda Seyfried) deberán demostrar en juicio que Ted es, en efecto, una persona.
Bastante buen número musical, en todo caso.
Les voy a ser sincero: la primera media hora-cuarenta minutos de esta película me resultaron insoportables. Estuve absolutamente tentado a parar la película. Entre chistes malos, situaciones incómodas nada cómicas y una sensación de que esta película existía simplemente por existir, realmente estaba tentado a pararla. No ayudó mucho la desaparición de Mila Kunis como la novia de John. ¡Sucede de la nada! Y si esto fuera una decisión porque la actriz decidió no participar, lo entendería, ¡pero esto fue totalmente elección de Seth MacFarlane porque le pareció mejor! Recordemos que Mila Kunis es la voz de Meg en Padre de Familia, no es como que, por último, pudieran haberla conseguido cinco minutos para grabar un par de escenas explicativas. Es una gran patada a lo que fue una gran primera película.
Pero luego, cuando la trama de "Ted es una propiedad, no persona" despega a eso del minuto cuarenta, el milagro ocurre. No solo la historia se puso realmente interesante, ¡sino que la película se tornó cien veces más graciosa! Digo, no es que estuviera llorando de la risa, pero comparado con mi cara de absoluto aburrimiento y desprecio durante el prólogo, creo que resultó ser un paso adelante.
Quizás es porque soy un aburrido abogado desempleado, pero la trama de la corte no solo fue graciosa, sino que resultó ser incluso profunda para esta película no demasiado ambiciosa en principio. El dilema sobre la humanidad de Ted es interesante, y da para excelentes momentos de desarrollo de personajes, incluso un par de momentos genuinamente tristes. Esa mezcla de emociones y razonamientos filosóficos es extraño en una comedia. Y tengan en cuenta: estamos hablando sobre una película de un oso de peluche drogadicto. Un poco de nivel intelectual es siempre agradecido.
Te amo
La relación entre Mark Walhberg y Ted sigue siendo divertida y natural, y la adición de Amanda Seyfried al cast en reemplazo de Mila Kunis fue una buena decisión. No porque quisiera que reemplazaran a Mila, pero ya que sucedió para nuestra desgracia, bien podrían poner en su lugar a alguien encantador y competente, y Amanda cumple bien ese rol. Y este trío sostiene bien la película, incluso en un clímax que parece innecesario e incluido porque, bueno, esto es una película y tiene que tener un clímax.
Miren, Ted 2 es regular, no puedo perdonarle esos primeros insufribles cuarenta minutos ni algunas de sus decisiones, pero si pueden sobrepasar esa marca, probablemente pasarán un buen rato. Supongo que es como esos episodios de Padre de Familia o Los Simpsons que tienen un inicio irrelevante y no relacionado con la trama, y hacia el segundo comercial recién se ponen interesante. ¿Pueden vivir con ello? Yo sí, aunque Seth MacFarlane va a tener que subir su nivel si quiere que pague por ver la tercera.
Atentamente,
Farfaramir, el Tabernero que no es Tan Benevolente como Yo (¡MÚSICA DEL IMPERIO!)
Posdata: Siendo justos, hubo un chiste en particular con el que exploté de la risa. Involucra marihuana, porque no, pero por ese momento, lo valió.
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