martes, 23 de febrero de 2016

Deadpool (...¿y los ñoños rata?)

Estimados Lectores:

Las ratas mutantes es un nefasto de mayor alcance que una rata normal. Es un fenómeno contemporáneo, transversal, que no corresponde a un solo segmento etario y que día a día te topas en el sótano del bar comiéndose mi queso. De hecho, ¿alguien tiene veneno para ratas? ¡Están en todas partes y Samsagaz no sabe cazarlas! ¿Qué tiene que ver todo esto con Deadpool, se estarán preguntando? No lo sé, está de moda últimamente comenzar hablando de ratas las reseñas y no, bueno, reseñar realmente la película. Yo solo quería estar a la moda. Como sea, ¡Deadpool! ¡Muy atrasado con tanto Room, Joy, Brooklyn, Spotlight y otras películas con un solo nombre en el título para los Oscar? ¿Es realmente la película definitiva de chimichangas? 

¡Hey, hola, soy una foto de Deadpool rompiendo la cuarta pared! ¿Hola? ¿No? Ok. 


Título Original: Deadpool
Año: 2016
Director: Tim Miller

Comenzar aclarando un par de cosas: en mi corta y ratuna vida, no he leído mucho de Deadpool (aunque pueden leer mi reseña de Night of the Living Deadpool para el Multiverso 52 aquí). No sé de la historia del personaje, no sé quienes son sus aliados o enemigos, más allá de que es un mercenario que rompe la cuarta pared muchas veces. Pero los trailers y la campaña publicitaria parecían divertidos, ¡hey, porque no! Así que como de acuerdo a determinada reseña soy un ñoño rata por no haber leído exhaustivamente un solo personaje de Marvel (dentro de los cientos de miles que hay), quiero que tengan en cuenta eso a la hora de mirar mi opinión de la película: no soy un experto. 

No es extraño entonces que esta película haya sido la mejor manera de empezar nuestra año de cine chatarra comercial, el que tanto amamos en este blog. 

Wade Wilson (Ryan Reynolds) es un mercenario que en el mejor momento de su vida recibe una terrible noticia: ha sido diagnosticado con cáncer. Decidido a no dejar a su novia mercenaria detrás, decide someterse a un tratamiento experimental que usaría su enfermedad para convertirlo en un superhéroe. Poco sospechaba que el tratamiento en realidad lo iba a transformar en un mutante deforme. Decidido a cobrar venganza y a recuperar su rostro, Wade, ahora bajo el nombre de Deadpool, emprende un camino de venganza contra aquellos que lo transformaron en un monstruo.

Si hay un personaje copiado y pegado perfectamente a la pantalla grande de los X-Men, es Colossus

De la breve sinopsis ya pueden imaginarse el único mínimo problema que tiene la película: es una historia que hemos visto mil veces, la cliché historia de venganza que ya se estaba en el asilo de ancianos para el Conde de Montecristo. ¿Pero porque volvemos una y otra vez al mismo tipo de relato? Bueno, porque hecho bien y con cierto toque único, esta historia repetida hasta la muerte puede ser divertida y atrapante. Deadpool quizás no apueste a la originalidad en cuanto al fondo de su relato, pero es en todo lo demás en que se eleva por sobre el montón. Al final del día, a nadie le importara mucho que esto sea el esqueleto de un arco ya repetido al infinito: es una buena película, y es lo que vale al final.

Como deben haber adivinado, morí de la risa viendo Deadpool más veces de las que debería, quizás es la película de superhéroes con la que más me he reído a la fecha (muy cerca Guardianes de la Galaxia). ¿Hubo un par de chistes que no dieron en el blanco? Sí, pero es una porción tan menor que ni siquiera podría recordarlos ahora mismo. Hay tantos chistes y referencias por minuto que creo que tendré que verla de nuevo porque hay varios que simplemente omití mientras golpeaba el asiento. 

Y como ya es obvio, e incluso a quienes no les gustó la película parecen estar de acuerdo, Ryan Reynolds nació para ser Deadpool. Dudo mucho que alguien sea capaz de ver a otra persona en el papel por muchos años. Le da humor, vida y naturalidad al personaje. Es la clase de cretinos que simplemente adoras a pesar de ser unos tramposos desgraciados asesinos. 


Pero no es solo Ryan Reynolds un acierto de cast, prácticamente todos los personajes tienen su gracia y son memorables, particularmente los dos mutantes, Colossus y la adolescente (sé que tiene un nombre, pero si no la han visto, prefiero no arruinarles el momento). Pensé que iban a sobrar o incluso estorbar, ¡pero aportan muchísimo a la comedia! Y debo decirlo: quizás nunca fui un conocedor de Deadpool, pero si de los X-Men, y en 7 película ya encima, este es el primer X-Men que acierta absolutamente a su contraparte cómic (y Patrick Stewart). Es como si hubieran usado una impresora 3D para sacarlo del comic a la pantalla. ¡Y usan los trajes coloridos clásicos! ¡Muy bien ahí!

Otro elemento que me sorprendió muchísimo fue el romance. Cuando vi los trailers pensé que este iba a ser el elemento que iba a arruinar la película, donde iba a mirar incómodo la hora, ¡pero entre Ryan Reynolds y Morena Baccarin existe una excelente química! ¡Ambos son muy graciosos, grotescos, ordinarios y adorables juntos! 

Esto me lleva a quizás la mayor virtud de la película a mi juicio: la película sabe manejar los tonos. Cuando quiere ser gracioso, es lo más divertida que hay, cuando quiere ser dramática, a pesar de mantener el humor, te deja una sensación incómoda en el estómago, y cuando quiere romance, le damos. Sabe respetar cada momento, sin que en ningún instante sientas que estás viendo una película distinta, equilibrando bien cada momento. Esto es, principalmente, porque Deadpool no sigue una historia lineal, sino que vamos del presente al pasado constantemente, dotando de mucha agilidad a la trama.

Otro detalle es lo expresiva que es la máscara de Deadpool. No tiene absolutamente ningún sentido, pero es magnífico, realmente parece un personaje de cómic.

Podría pasar horas hablando de como me reí con cada referencia a cómics o películas, ¿pero cuál es el punto? Si la vieron, ya saben cuales son, y sino, prefiero no arruinarles la sorpresa. ¿Es la mejor película de superhéroes que hay? Para nada, pero cae en un tiempo adecuado cuando ya estamos un poco saturados con el tema y Deadpool aparece para dotarnos de nueva vitalidad, humor y acción. Es una cinta simple, con una estructura simple y efectos especiales simples (salvo un par de escenas hacia el final), pero dentro de su simpleza, cumple en cada aspecto, y eso es lo importante. No puedo esperar a la segunda parte.

Atentamente,
Farfaramir, el Ñoño Rata (con orgullo)



¿Qué fue eso de los ñoños rata?

Ok, no quiero dejarla en el aire, y pueden parar acá la reseña si prefieren, ¡vayan a ver Deadpool! No hay que hacer mucha matemática para ver que me refería a Doctor Malo con esta reseña. No tengo ningún problema con el tipo. No sigo sus reseñas, pero en sus podcasts con Hermes parece un tipo muy gracioso y que sabe harto de lo que habla. Pero más importante aún, creo que al igual que todos, está en su derecho a que no le guste la película, y lo aplaudo por su valentía (a pesar de que luego pareció dar a entender que le gustó Deadpool, solo que no le fascinó demasiado). Nunca olvidemos que, más allá de elementos técnicos o narrativos, el análisis de cine es esencialmente subjetivo, ¡yo odie Interstelar y ame The Amazing Spiderman 2, la vida es así! No deberíamos tener miedo a estar contra el mundo a veces solo para no tirarnos al internet encima. Créanme que yo lo he vivido. 

Dicho eso, creo que su análisis de los ñoños ratas peca de soberbia. Es cierto, no es divertido ver a un niño pretencioso llegar y postear memes malos de Capitán América cuando tu has vivido en silencio por muchos años del mundo ñoño, ver a ese cretino que se río de ti por tus gustos de pronto enaltecerlos como su propiedad. Créeme que lo entiendo. Pero también hay que recordar que uno no es un experto en todos y cada uno de los temas, y que al llegar a un mundo nuevo nos gusta infundirnos del entusiasmo de los que ya llevan tiempo atrás. Yo no sé nada de animé, y de seguro mis amigos más "otakus" me odiaron profundamente con mi repentina revelación a Evangelion hace unos meses atrás, posteando imágenes y memes de Shinji más jubilados que Rocky en Creed. Y eso aplica no solo al mundo cómic, sino a la música, a los videojuegos, al cine en general, nombra lo que quieras. 

El ñoño rata puede convertirse en un maestro Splinter... rata.

Hablar con tanta virulencia de quienes son nuevos y entusiastas (a veces demasiado entusiastas) debería hacernos ver porque hace años los ñoños eramos tan mal mirados, porque somos unos cretinos. Y no deberíamos serlo. Está bien compartir este nuevo mundo, esta bien que hayan películas más simples como Deadpool dedicadas a un público nuevo. Porque no debemos olvidar que sin ese nuevo público, ninguna de estas películas podría ocurrir, y estaríamos estancados en los años 90, con una adaptación penca de cómic cada dos años, rogando de que por favor adapten a mi superhéroe favorito. ¡Hoy tenemos película de Guardianes de la Galaxia y Ant Man! ¡IMAGÍNATE!

Lo que es yo, adoro ver estas películas con mis amigos, incluso con aquellos que no conocen de este mundo. Adoro compartir mi conocimiento, y que ellos me enseñen lo que ellos saben de sus propios mundos. Es esta humildad la que crea verdaderos lazos. Hasta hace un año muchos de mis amigos jamás habían visto Star Wars, y ahora podemos compartirlo como una comunidad, y reírnos de la repentino fanatismo de un colega por Jabba The Hutt. ¿Crees qué me molesta? Por el contrario. Jamás había sido tan feliz de poder compartir mi amor por cosas ñoñas con todos. No sea deprima Doctor Malo: los memes pencas de Capitán América quizás terminen, pero roguemos porque este auge de la cultura ñoña no llegue a su fin. Pues no serán los memes o películas como Deadpool las que terminen por aniquilarla, sino la soberbia de quienes no supimos aprender a compartir. 

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