Estimados Lectores:
¿Que diferencia hay entre "Deep Impact" y "Armageddon"? Hay muchas, pero si tuviéramos que resumirlas en una sola, sería... (Redoble de Tambores). Así es: BRUCE WILLIS. Una película mediocre ciertamente que puede convertirse en una pieza épica de proporciones con el maestro Willis poniendo cara de sujeto cool y cansado, pero que de todos modos cumple con el trabajo sucio. Pero el cast de Armageddon no se resume exclusivamente en el intérprete de John McClane: desde el mitológico Michael Clarke Duncan (el gigante de Milagros Inesperados), pasando por Steve Buscemi con su cara de orate, siguiendo por Owen Wilson e incluso el mismísimo Lucius Malfoy, Jason Isaacs. Esto (e incluso más) quedan bajo la dirección de Michael Bay, quien por supuesto lleva ya encima el peso del "creador de películas gringas con muchas explosiones" encima desde hace ya rato. ¿El resultado? ¿Impacto Profundo Meets Duro De Matar Meets Transformers? Algo así, pero vamos adentro y descúbrelo conmigo.
La clase de posters que es al mismo tiempo inmensamente ridículo e infinitamente épico.
Título Original: Armageddon
Año: 1998
Director: Michael Bay
La película comienza con un innecesario Flashback a "The Land Before Time" (?) cuando un meteorito golpea la Tierra donde habita Pie Pequeño extinguiendo los dinosaurios para siempre. Inmediatamente después, aparecemos en el siglo XX, donde una pequeña lluvia de rocas golpea Nueva York, en lo que juro es una escena calcada parte por parte a la llegada de los Decepticons a la tierra. Sin embargo, como descubre el servicio de Inteligencia Norteamericano esto es solo el preludio para un verdadero Apocalipsis en forma de roca gigante: un enorme asteroide se dirige a la Tierra, y golpeará su superficie en un plazo poco superior a dos semanas. Claramente, no tenían a Elijah Wood haciendo tareas en el colegio para descubrirlo con anticipación. Cada plan planteado es desechado por el equipo de expertos del presidente liderados por Dan Truman (Billy Bob Thorton), deciden recurrir al plan más absurdo concebible: conseguir a un grupo de perforadores de petróleo, enviarlos al espacio, poner una bomba nuclear en el asteroide, hacer que este se divida en dos y que pase de largo. Por alguna razón que desconozco, mientras otros planes como invocar a Linterna Verde o a los Vengadores fueron descartados mientras ese sobrevivió. ¿Y quién será el valiente perforador que irá al espacio? Adivinaron: Harry Stamper (Bruce Willis), quien en su vida jamás ha encontrado una roca que no sea capaz de perforar.
Stamper acepta con la condición de llevar consigo a su equipo de chalados colegas: el mujeriego Rockhound (Steve Buscemi), el enorme Oso (Michael Clarke Duncan), el religioso vaquero Oscar (Owen Wilson), y a A.J. Frost (Ben Affleck), a quien acaba de descubrir acostándose con su hija, Liv Tyler. Además de otros sujetos azarosos (y que muy probablemente morirán), Stamper debe llevar en la misión a un grupo de expertos de la NASA (entre ellos William Fichtner, a quien recordarán como el Némesis de Michael Scofield en Prison Break), y por supuesto, las relaciones no son muy buenas. Sin embargo, el reloj corre y hay una bomba que poner en la cola de un enorme asteroide, y ya saben como funcionan las películas gringas sobre astronautas: todo lo que podría salir mal, sale mal. De hecho, la estructura de la cinta es un tanto repetitiva desde cierto punto: un fallo técnico impreviso/una fuga de gas pone en peligro toda la misión y por un momento estamos todos condenados, pero alguien mágica e heroicamente logra detenerlo, unas cuantas veces debiendo sacrificar la vida de alguien, e inmediatamente después un nuevo problema técnico/fuga de gas los pone a todos en peligro... repite ese ciclo hasta el infinito y obtienes armageddon. (Eso, con una pisca de música épica y unas cuantas banderas gringas flameando en el horizonte)...
Stamper acepta con la condición de llevar consigo a su equipo de chalados colegas: el mujeriego Rockhound (Steve Buscemi), el enorme Oso (Michael Clarke Duncan), el religioso vaquero Oscar (Owen Wilson), y a A.J. Frost (Ben Affleck), a quien acaba de descubrir acostándose con su hija, Liv Tyler. Además de otros sujetos azarosos (y que muy probablemente morirán), Stamper debe llevar en la misión a un grupo de expertos de la NASA (entre ellos William Fichtner, a quien recordarán como el Némesis de Michael Scofield en Prison Break), y por supuesto, las relaciones no son muy buenas. Sin embargo, el reloj corre y hay una bomba que poner en la cola de un enorme asteroide, y ya saben como funcionan las películas gringas sobre astronautas: todo lo que podría salir mal, sale mal. De hecho, la estructura de la cinta es un tanto repetitiva desde cierto punto: un fallo técnico impreviso/una fuga de gas pone en peligro toda la misión y por un momento estamos todos condenados, pero alguien mágica e heroicamente logra detenerlo, unas cuantas veces debiendo sacrificar la vida de alguien, e inmediatamente después un nuevo problema técnico/fuga de gas los pone a todos en peligro... repite ese ciclo hasta el infinito y obtienes armageddon. (Eso, con una pisca de música épica y unas cuantas banderas gringas flameando en el horizonte)...
Cuidado con MEGATROOOOOOON!
Como ya habrán notado, el lado fuerte de Armageddon se encuentra en los personajes... No son especialmente complejos, pero son un explosión de diversión que te mantiene pegado durante 2 horas y media de película que se pasan volando. Por supuesto, es Bruce Willis es... Bruce Willis, no hay absolutamente ninguna diferencia entre el personaje de Harry Stamper y cualquier otro que el señor Willis haya interpretado en el pasado. ¡Y está bien! Es exactamente por lo que venimos, es exactamente lo que obtenemos. Mezclado con los demás personajes ya mencionados, hacen que una larguísima secuencia de entrenamiento para ir al espacio sea uno de los momentos más notables de toda la película, con la consecuente "noche libre de los astronautas". Son personajes con química, y cada uno de ellos es un caso particular, salvo por dos... Sí, ya lo sospechaban, Ben Affleck y Liv Tyler son los personajes que intentan añadir "el factor romántico" a una película que, naturalmente, ya está cargada de suficiente melosería para que tengamos que soportar a esos dos. Y ni siquiera son una pareja demasiado chistosa, de algún modo, rompe el esquema. Aunque siendo justos, el personaje de A.J. si ofrece algunos momentos jocosos cuando interactua con su futuro suegro, el problema es la elfa... No se dejen engañar, Liv es una horrorosa actriz. Muy hermosa, mi amor platónico de la infancia junto con Emma Watson, pero horrible actriz al fin. De hecho, la única razón por la que funcionó como Arwen es porque los elfos tienen que tener cara de maniquí, es obvio que un mal actor funcione bien como tal.
¿Que hay del resto de la película? Pues es la clásica película de astronautas, con doble acción, por un lado las naves espaciales, por otro lado el centro de control. Es una dinámica ya conocida, y supongo que funciona bien en esta. Pero Dios santo que es la películas más gringa que he visto desde El Día De La Independencia... Y con gringa no me refiero a "trama simplona", ya saben por el encabezado del blog que no tengo ningún problema con el cine chatarra yanqui, pero a esta solo le falto el piloto presidente para ser más pro Estados Unidos. Háganse la idea: un grupo de ciudados estadounidenses comunes y corrientes se embarcan en una misión para salvar el planeta... Mientras el presidente de los Estados Unidos habla a todo el globo con música épica de fondo. Que más GRINGO que eso te puedes poner... Es un speech de un nivel de ridículo y magnificencia combinada que no existen palabras para describirlo. ¡Oh, pero hay más! ¡En la escena del despegue, con la música épica in crescendo, Liv Tyler sonríe emocionada con una bandera de Estados Unidos flameando a sus espaldas! Pero como no siento una especial animadversión contra los gringos y los McDonalds, creo que puedo dejarlo pasar. De hecho, me encontré a mi mismo saltando emocionado con los pequeños triunfos de nuestros héroes y escondido bajo las sábanas cruzando los dedos ante los pequeños fracasos. A todo esto, la música es espectacular, échenle un vistazo, les aseguro que les dará ganas de salvar el universo... yanki.
Mr. Jingles, what are you doing up here?
La pregunta obvia ahora es: ¿que tan buena es como película de fin del mundo? Bueno, supongo que no funciona tan bien como en Impacto Profundo, en ese sentido su cinta hermana es muy superior. Y hay dos razones: primero, porque estamos más enfocados en la misión espacial que en lo que sucede en la Tierra, y segundo, porque los efectos especiales son ligeramente inferiores. El diseño del meteorito es similar al planeta donde residían los Aliens, faltaba Hadley Hopes y un Space Jockey para hacerlo más idéntico... Pero el problema es que parece una enorme maqueta. A ratos, no podía creer que estuvieran realmente en el espacio, de hecho, ¡muchas veces ni siquiera actúan como si estuvieran en un enorme asteroide! Se sacan los cascos, caminan como si corrieran por el parque, es un caos. Lo mismo sucede con las escenas de destrucción: hay al menos 3 escenas de meteoritos golpeando la Tierra y salvo la final, son un tanto absurdas y de bajo presupuesto. No lo sé, no me convencieron demasiado. Pero a su favor, si hay dos escenas que me dieron una sensación apocalíptica: el momento en que la Nave Libertad se estrella en un extremo del meteorito (creo que la mejor escena de toda la película), y la secuencia donde, pareciendo todo perdido, los medios anuncian que la misión fracaso. Y vemos a toda la Tierra preparándose para su inminente destrucción... Esos momentos son enormes. Eso sumado a que los personajes son muy queribles, nos lleva a que aplaudamos de pie al desenlace: queremos que los gringos ganen (con el ruso, quien por cierto también es un personaje remarcable).
En suma, es una película muy entretenida. Llena de clichés, llena de momentos innecesariamente épicos, lleno de Tío Sam y Mickey Mouse, pero si pueden vivir con ello, la van a disfrutar a concho. Eso sí, antes de terminar, no puedo dejar de mencionar una escena que me superó en cuanto a la gratuidad. Y es la destrucción de Paris. No se equivoquen, creo que en el aspecto visual es la escena superior de la película, ¡pero sucede y nadie jamás lo vuelve a mencionar! Digo, cuando un astronauta inútil muere en el espacio, todos lloran, pero, ¡oh, tranquilo, murieron millones de franceses junto con las mayores obras de arte de la humanidad y la tumba de María Magdalena, no es nada relevante! ¡Son solo franceses! ¿PORQUE CELEBRAN AL FINAL COMO SI OBTUVIERON UNA VICTORIA CUANDO UNA HORROROSA CATASTROFE OCURRIÓ EN EUROPA! Disculpen, pero si en 2012 al olvidarse en 5 segundos de un personaje principal que muere ya cruzaron una raya, en Armageddon sencillamente se fueron al chancho... En fin, estoy sobreanalizando, a mi gusto, si puedes disfrutar con El Día De La Independencia, podrás disfrutar con Armageddon y sus notables personajes. Bruce Willis le otorga a esta película un 7/10 (JA! Lloren fanáticos de The Amazing Spiderman, le di más a esta que a su preciado reboot), y nos vemos mañana para más franceses siendo destruidos en miles de pedazos y olvidados al segundo siguiente.
Bon Vayage
Monseiur Farfaramir
Un glitch en el blog hace que esto aparezca publicado dos días antes de lo que realmente fue publicado... ¿Anomalía en la matrix?
ResponderBorrares una señal del fin de mundo
Borrares tan entretenida ajjajaaj me reia mucho con ella
ResponderBorrarNo puede ser, yo ni me acordé de los franceses, LOL
ResponderBorrarJajaja, nadie los recuerda, pero cuando me senté a verla de nuevo para escribir la review me chocó de frente jajaja
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